Apenas habían pasado unos minutos del mediodía, cuando en la sala donde se iba a realizar la conferencia de prensa de Roger Federer y Juan Martín Del Potro se presentaron otros dos tenistas, o mejor dicho ex tenistas, tan grandes como la historia que supieron escribir: Guillermo Vilas, el más ganador de la historia del tenis nacional, con 62 títulos, y su ex compañero de equipo de Copa Davis, José Luis Clerc, segundo en la lista de los más ganadores, con 25 conquistas. Las dos leyendas, protagonistas de un duelo personal que se extendió por años y que no distinguió momentos –basta recordar la final de la Copa Davis de 1981, cuando ni siquiera se hablaban durante el partido ante John McEnroe y Peter Fleming– se enfrentarán entre sí antes de que lo hagan Federer y Del Potro. Los dos se mostraron distendidos y regalaron a los presentes varios pasajes de comedia, cargadas por la edad y hasta un abrazo a pedido de la prensa. “Voy a enfrentar a un gran amigo, a alguien que hizo que los argentinos jugaran al tenis”, comenzó Clerc. “Nosotros nos vamos a divertir, la gente que nos vea jugar va a llorar”, bromeó luego. Vilas devolvió gentilezas, entre risas. “Hola Batata, ¿qué hacés acá?”, soltó y en el salón estallaron las primeras risas. “¿Viste cómo convocamos todavía?”, tiró Clerc. Luego, más serio, Vilas comentó: “Jugar con Batata es especial. Nosotros hemos crecido juntos. Los dos pensamos distinto, nos hemos peleado, pero porque buscábamos ganar cosas importantes –y otra vez en broma–. Creo que vamos a poder terminar el partido, digo, de alguna manera, no sé si vivos”. Consultados sobre si este encuentro podría llegar a definir el historial entre ambos, que están empatados en cuatro victorias, Clerc comentó que será un partido más de los que tienen pensado jugar, ya que también –informó– jugarán más adelante “un partido de tenis en sillas de ruedas a beneficio”. De todas maneras avisaron que el duelo será en serio, “ninguno de los dos va a querer perder”.

Tanto Vilas como Clerc se mostraron dispuestos a colaborar con el equipo argentino de Copa Davis. Vilas, que por estos días viene insinuando sus ganas de ser ungido algún día como capitán del equipo nacional, se lamentó de tener poco diálogo con los actuales integrantes del equipo, sobre todo con los jugadores, y al igual que Clerc mencionó que tienen muchas cosas para aportar. “Estamos dispuestos para cualquier consulta de los jugadores o para intervenir en el equipo. Si piensan que podemos ser útiles, que nos llamen”, remarcó el marplatense, quien el fin de semana pasado recibió el diploma platino-diamante como miembro del Salón de la Fama de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), y durante la entrega apuró en el mismo punto al presidente de la entidad, Arturo Grimaldi.