DEPORTES
Una emoción padre
Por Facundo Martínez
–Da la sensación de que el fútbol tiene bastante que ver con los padres...
–Creo que sí, que tiene algo que ver con la figura paterna, con una virilidad que se pone ahí en juego y con un modo de descubrimiento de las costumbres, de los usos, que se dan entre padres e hijos. Yo empecé a ir a la cancha con mi padre, que es una iniciación bastante común. Hay una relación directa con la intimidad de una experiencia. El fútbol es una experiencia donde el padre –en un juego donde lo que está en cuestión es la potencia, la posibilidad de vencer al otro– aparece en sus pasiones: en sus debilidades, en sus fragilidades y a la vez también en su potencia. Yo recuerdo muchas anécdotas con mi padre en la cancha de River y me parece que en esos recuerdos se constituye una subjetividad en relación con el fútbol, en esa memoria de esas experiencias y esa intimidad. Te diría también que mucho de la relación con mis hijos –sobre todo con uno, al que le gusta más el fútbol– pasa por el fútbol. Y en esa emoción vibra el fútbol.