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Desde que en 1969 Perú dejó fuera del Mundial a la Argentina en la cancha de Boca, el enfrentamiento entre ambos en Buenos Aires se convirtió en un auténtico partido aparte, y aunque el seleccionado albiceleste jamás perdió ante los peruanos en condición local, muchos de esos partidos tuvieron un sello propio distintivo.

Argentina recibió a Perú en 15 ocasiones, con un saldo de doce triunfos y tres empates, más 35 goles a favor y diez en contra. Por trámite de Eliminatorias mundialistas, se enfrentaron en siete ocasiones en territorio argentino, con cinco victorias y dos empates, con 14 tantos para el local y seis para la visita.

Una de esas igualdades, el 2-2 en 1969 en la Bombonera, dejó a Argentina fuera de la Copa del Mundo de México 1970, en el único certamen ecuménico al que el equipo nacional no concurrió por ser eliminado en la ruta previa. A la ida, Perú había ganado 2-0.

El segundo empate fue el registrado en 1985, en la cancha de River, por el mismo resultado 2-2, con el gol agónico de Ricardo Gareca, tras una enorme muestra de coraje de Daniel Passarella, que terminó significando la clasificación al Mundial del equipo dirigido por Carlos Bilardo, que luego se consagró campeón del mundo en 1986. Ese gol agónico acabó por dejar fuera del Mundial a los peruanos, que a la ida habían vencido 1-0 en la tarde que Luis Reyna marcó con métodos exasperantes a Diego Maradona.

Precisamente con Maradona como técnico de la Selección se vivió el último partido por Eliminatorias en el estadio de River, la noche del 9 de octubre de 2009 en la que Martín Palermo aseguró la victoria 2-1 bajo la lluvia, cuando la Selección sufría para clasificarse al Mundial. Ese fue el último jalón de una historia con gran significado.