DEPORTES › DANIEL GIMENEZ, CLEMENTE RODRIGUEZ, IARLEY Y BIANCHI
La movida tarde de los pelados
Pelado 1. Daniel Giménez. El más notorio de los pelados en la tarde de la Bombonera, el blanco de las puteadas de los boquenses en algún pasaje del primer tiempo y de todo San Lorenzo después. Instalados desde antes del partido en el rol de víctimas, Gorosito y sus jugadores encontraron en el árbitro el medio más a mano para explicar todas sus desgracias. Dirigió mal Giménez, pero fue parejito en el error: abusó de la amarilla (sacó once), cobró foules inexistentes y no cobró otros que sí se habían producido en iguales proporciones para uno y otro equipo. Irritó mucho a los hinchas azulgrana la amarilla que le sacó a Barrientos por aparentar una falta en una jugada en la que había caído en el área por contacto físico. No había sido penal, pero tampoco hubo simulación. Por otra parte, en la cancha pareció exagerada la roja directa a Diego Capria, pero la televisión mostró claramente un patadón sin pelota a Iarley, quien después de un foul menor se retiraba de la escena. Una verdadera gilada de Capria que merecería el reproche del técnico y sus compañeros porque su salida benefició, naturalmente, a Boca. Algo parecido ocurrió con Morel Rodríguez, quien golpeó al mismo Iarley también sin pelota, después de que el juez cobrara la falta. A Morel, Rodríguez lo echó por doble amarilla y no por roja directa, y en esto hacen eje los de San Lorenzo, quienes creen que también a Capria debió sacarle amarilla.
Pelado 2, Clemente Rodríguez. Jugó un partidazo, manejó de punta a punta el lateral, no lo pasaron nunca y cuando se proyectó ganó por rapidez, por habilidad y por inteligencia. Para rematar su buena actuación metió un pase fantástico a Iarley en el gol. Hacía bastante que no salía un partido tan redondo.
Pelado 3, Iarley. El delantero más activo de Boca y de la cancha. Exigió siempre al fondo visitante y buscó asociarse en el toque con Donnet, Colautti y Guillermo, quienes no entendieron demasiado la propuesta. Definió bien en el gol, pero se apresuró en otras situaciones similares e hizo patente el déficit de gol del equipo. En la competencia por un lugar en el conjunto que jugará contra el Milan, el brasileño le sacó muchos metros de ventaja a Donnet.
Pelado 4, Bianchi. Paró al equipo para permitir un partido abierto sin especular con un empate que podía resultar muy buen negocio. Sigue sin encontrar la vuelta al principal problema que se le presenta hoy: la falta de gol. Guillermo Barros Schelotto puede ser una solución, aunque por ahora, como es lógico, está falto de fútbol.