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Acusan a economistas de Menem de boicoteadores

El jefe del duhaldismo en el Congreso, José María Díaz Bancalari, y el ministro de la Producción, Aníbal Fernández, afirmaron que liderados por Pablo Rojo el grupo de economistas jugó en contra en el FMI. El papel del embajador Guelar.

Primero lo dijo el ministro de la Producción, Aníbal Fernández, en un reportaje con Cash. Ayer, el mismo funcionario y el jefe del duhaldismo en el Congreso, José María Díaz Bancalari, volvieron sobre el tema. Se trata de una denuncia contra economistas del menemismo por haber operado en Washington para que el FMI no firme un acuerdo con este gobierno. “A mí me consta que hubo gente trabajando en contra de la Argentina en el Fondo”, aseguró Fernández. El ministro dijo eso mismo el último domingo en el suplemento económico de Página/12, pero se negó a precisar si se refería a Pablo Rojo, a quien aludía de manera ambigua. Ayer tampoco hizo nombres, pero Díaz Bancalari terminó con el misterio y le apuntó tanto a Rojo como a otros técnicos del menemismo. Los imputados desmintieron las acusaciones y contraatacaron al duhaldismo.
Díaz Bancalari aseguró que el embajador saliente en Estados Unidos, Diego Guelar, “armó una reunión por su cuenta y sin consultar a la Cancillería” del equipo menemista con el director del FMI Anoop Singh. “Estuvieron Rojo (ex presidente del Banco Hipotecario), Rogelio Frigerio nieto (ex secretario de Programación) y Francisco Susmel (ex titular de la CNV)”, mencionó el diputado. El ministro de la Producción dio la misma versión, sólo que resumida. Sostuvo que “Guelar llevó (a Washington) a tres economistas para que dijeran (al Fondo) que no arreglara con este gobierno, total cuando llegara (Carlos) Menem (iba a arreglar)”.
Fernández agregó que “alguno de ellos se arrogó el derecho de decir que sería el ministro de Economía de uno de los candidatos y que él iba a firmar muchos de los acuerdos que Argentina hoy no firma, precisamente porque son incumplibles”. La ofensiva de dos incondicionales de Duhalde contra el menemismo se inscribe en la pelea política entre esos dos sectores. Los hombres del Presidente intentan demostrar que sus contendientes no tienen límites en la convulsionada interna peronista.
La respuesta fue tan contundente como la acusación. Salieron tanto Rojo como Guelar y Diego Estévez, otro de los economistas que estuvo en aquellas reuniones en Washington, quien hizo declaraciones a pesar de que nadie lo había nombrado. El ex titular del Banco Hipotecario reseñó que “en aquel encuentro le expresamos al Fondo que queríamos un acuerdo para estabilizar las variables económicas durante la transición política”. Guelar se limitó a afirmar que la denuncia es “absolutamente falsa”.
El que más se explayó fue Estévez. “Nos sorprende notablemente que digan algo como eso, que forma parte del enfoque maniqueo de considerar siempre que la culpa la tienen los demás”, le dijo a la agencia Télam desde Madrid, adonde se encuentra presentando el programa económico del menemismo y dialogando con inversores. El economista insistió en que los asesores de Menem “estamos de acuerdo en llegar a un entendimiento con el Fondo y se lo dijimos a Anoop Singh”. “El único reparo que pusimos –reconoció– fue que nos parecía adecuado que se firmara un acuerdo corto, pero Singh nos explicó que por los estatutos del FMI no podía ser menor a un año. Ahí propusimos la posibilidad de incluir una cláusula gatillo que le permita al próximo gobierno renegociar todos los vencimientos”, indicó Estévez.
Sin embargo, la denuncia del duhaldismo no se limitó a aquella reunión con Singh. Díaz Bancalari recordó otro incidente, anterior al viaje a Washington de Rojo y compañía. Fue cuando vino la comisión de “notables”, en julio pasado. “En una reunión con ellos, en la que estaba el ex secretario de Hacienda del menemismo Pablo Guidotti, éste les dijo que el FMI no tenía que hacer ningún acuerdo con Argentina porque este Gobierno no daba ninguna garantía”, afirmó. “Después Guidotti lo repitió ante los medios de comunicación”, insistió el legislador. Hasta el momento, la única repercusión palpable de la acusación contra el menemismo es la salida de Guelar como embajador en Washington.
En su defensa, Guelar negó haberle facilitado el camino a un grupo de economistas para que intentaran trabar el acuerdo. “Es absolutamente falso”, enfatizó. Después reconoció que si las denuncias fueran ciertasserían “gravísimas”, pero reiteró que el hecho que se le imputa es mentira.
Díaz Bancalari criticó a Menem por su “trayectoria de diez años siguiendo a pie juntillas los mandatos del FMI”. “Por seguir al Fondo, estamos en el fondo”, ironizó. Finalmente, reclamó al organismo “alguna indemnización para los que sufrimos las consecuencias, porque acá es cirugía mayor sin anestesia –dijo, recordando una conocida frase del ex presidente–, pero los que ponemos el cuerpo somos los habitantes de Argentina”. Con una visión opuesta, Estévez subrayó que “mal nos pueden responsabilizar por la falta de acuerdo cuando el Gobierno no tiene solucionado el programa de sustentabilidad fiscal y no parece clara la intención de integrarse al mundo”.

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El ministro Aníbal Fernández había adelantado en Cash la jugada de los menemistas en el FMI.
 
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