El ministro de Economía, Amado Boudou, se reunirá hoy en Roma ante un grupo de tenedores minoristas a los que buscará convencer de participar del canje de deuda. La semana pasada, el grupo Task Force Argentina (TFA), que afirma representar a inversores italianos que tienen 4400 millones de dólares en bonos argentinos impagos, cuestionó la oferta, pero dejó en libertad de acción a los inversores asociados para que decidan si entran o no en el canje.

En Italia se concentra el mayor porcentaje de inversores minoristas, en una gran mayoría jubilados, que accedieron a los bonos argentinos por iniciativa de bancos locales. Estos bonistas tienen tiempo para adherirse al canje hasta el próximo 7 de junio. En un comunicado, TFA indicó que “aceptar la oferta es una cuestión personal de cada uno de los inversores”, aunque aseguró que “lo que ofrece el gobierno argentino es mucho peor que lo que sus miembros ya rechazaron en 2005”.

En el caso de los inversores mayoristas, el viernes concluyó el plazo de adhesión, pero a partir de hoy, quienes integran este grupo y aún no ingresaron sus tenencias también podrán hacerlo, pero abonando un centavo más por cada lámina de 100 dólares presentada. Si bien no hubo información oficial, trascendió que el nivel de aceptación entre los mayoristas habría estado en línea con las expectativas gubernamentales. El resultado de esta primera etapa del canje será anunciado oficialmente el próximo viernes.

Además, la cartera económica anunciará mañana el precio de corte del Boden 2017, que les será entregado a los inversores institucionales para el pago de los intereses caídos desde 2005 a la fecha y definirá si toma dinero fresco –a la tasa de corte que resulte de las ofertas presentadas–. El objetivo del Gobierno es colocar un Bono Global con vencimiento en el 2017 por 1000 millones de dólares, lo que representaría el regreso de Argentina a los mercados internacionales de crédito. En reiteradas oportunidades, Boudou admitió que si no se consiguen tasas inferiores al 10 por ciento –debido al impacto de la crisis griega en los mercados financieros– no se hará la emisión del bono.