El ministro de Desarrollo e Industria de Brasil, Miguel Jorge, afirmó ayer que su país podría tomar represalias contra los productos provenientes de Argentina si este país impone restricciones a la importación de alimentos brasileños. Welber Barral, secretario de Comercio Exterior brasileño, agregó a su vez que las sanciones podrían adoptarse en forma inmediata si fuera necesario. “Brasil tiene un mecanismo electrónico de control de importaciones: es un botón”, indicó. Tanto Jorge como Barral aseguraron que no hubo notificación alguna del gobierno argentino, hasta el momento, sobre la aplicación de sanciones. “Estamos trabajando, el embajador brasileño (en Buenos Aires) está teniendo reuniones para evitar que esto acontezca”, expresó el ministro. La presidenta argentina participará hoy de un foro organizado por Naciones Unidas, al cual se especulaba que podría concurrir acompañada por el ministro de Economía, Amado Boudou, en caso de que el tema que afecta las relaciones comerciales tomara mayor trascendencia.

Ambas declaraciones fueron formuladas en Brasilia, donde empezaron a hacerse eco de la versión surgida desde Buenos Aires acerca de restricciones argentinas a las importaciones brasileñas. Barral indicó que, por el momento, “lo que hay son rumores de la prensa argentina y una declaración de la Presidenta diciendo que todos los acuerdos serán cumplidos (...). Brasil exporta a la Argentina un cuarto de lo que importa en productos alimenticios (exporta por unos 500 millones de dólares e importa por unos 2000 millones) y es muy difícil pensar que alguien racional quiera crear trabas a eso”, expresó.

El secretario de Comercio Exterior agregó que se está haciendo un seguimiento a diario de los acontecimientos, pero que no se adoptarán sanciones en base a trascendidos. “No porque un ‘sub del sub’ (funcionario de menor rango) tuvo una idea estrafalaria, que siempre sucede, vamos a tomar medidas sin evaluación previa”, reflexionó.

Barral comentó también que ayer se recepcionaron en su Secretaría quejas por ocho camiones que fueron demorados en la entrada a la Argentina. “Todavía es una cantidad normal, ahora estamos verificando si la exigencia (por la cual se demoró el ingreso) es desmedida o se trata de una empresa que se olvidó de llenar un formulario”, señaló el titular de Comercio Exterior, intentando quitarle dramatismo al tema.

La versión difundida por medios argentinos indicaba que las limitaciones a la importación de alimentos entrará en vigencia el 1º de junio. Los importadores, a través de la cámara que los agrupa, habían referido que en las dos primeras semanas del mes hubo algunas trabas y demoras en la autorización del despacho a plaza de alimentos provenientes de Brasil, pero que posteriormente se normalizaron, sin más vehículos de transporte varados en la frontera (fundamentalmente, en Paso de los Libres).