ECONOMíA › REINTEGRAN IVA EN COMPRAS CON TARJETA DE CREDITO
Oxígeno para llegar al final
La edición de hoy del Boletín Oficial incluirá una resolución que busca “reactivar el consumo interno y luchar contra la evasión”. Así dice la norma que firmó ayer Roberto Lavagna, por la cual las compras con tarjeta de crédito se verán beneficiadas con un reintegro de 3 puntos porcentuales del IVA. La retribución equivale a 2,48 por ciento del precio total del producto o del servicio pagado con el plástico. Si lo que hace el usuario es cargar combustible o pagar la boleta del gas, el reintegro se reduce al 1,27 por ciento de la factura. La medida había sido anticipada por el ministro de Economía antes de partir a Italia y ayer, a su regreso, la concretó. De todos modos, su entrada en vigencia será el primer día del mes siguiente a aquel en que la AFIP reglamente el sistema.
El organismo que conduce Alberto Abad tiene hasta mañana para sacar la resolución y que la medida se aplique desde abril. De lo contrario, quedará para mayo. Pero el Gobierno tiene apuro en implementar el reintegro para terminar su gestión con la mejor imagen posible. La medida tiene un plazo de duración de un año. Adicionalmente, Lavagna equiparó el vencimiento del descuento de 5 puntos porcentuales del IVA por las compras con tarjeta de débito a la nueva restitución para las tarjetas de crédito.
Las administradoras de tarjetas deberán computar como crédito a favor de los usuarios 3 puntos de lo que hayan pagado de IVA en el resumen del mes siguiente al que efectuaron los pagos. El beneficio es para compras de no más de 1000 pesos y para consumos realizados en el país. El otro requisito es que los titulares de las tarjetas sean personas físicas y que las compras sean realizadas en su carácter de consumidor final. Por otra parte, quedan exceptuados del régimen de restitución los pagos con tarjeta realizados mediante el sistema de débito automático.
Lavagna argumentó que la medida persigue el objetivo de reactivar las ventas y tender a un blanqueo de la economía, lo que en definitiva aportaría más recaudación. El otro objetivo es presionar a los bancos que emiten las tarjetas para que disminuyan las tasas de interés que están cobrando a sus usuarios. El ministro anticipó que tomaría esta decisión cuando la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados se quejó ante el presidente del Banco Central, Alfonso Prat Gay, por los intereses que aplican las entidades financieras, que trepan en algunos casos hasta el 80 por ciento anual. En efecto, la resolución que firmó ayer Lavagna establece que el reintegro “queda condicionado a la disminución de las tasas de financiación actualmente vigentes”.
El nivel de rebaja de las tasas saldrá de una negociación entre las secretarías de Hacienda y Finanzas y los bancos emisores de las tarjetas. El otro participante en esa mesa será la AFIP. Los bancos se muestran remisos a conceder financiamiento y cuidan la liquidez. Con esta medida, el equipo económico procura que flexibilicen esa posición y darle oxígeno a la economía, aunque sea mediante la financiación con tarjeta.