El giro de remesas al exterior para ayuda familiar hasta 300 dólares se podrá realizar a través del Correo Argentino, revelaron desde el Banco Central a Página/12. La medida se aplicará durante las primeras semanas del mes próximo y tiene por objeto evitar los abusos en que incurren las remesadoras de dinero, que cobran en concepto de comisiones hasta un 50 por ciento del monto enviado. Los usuarios podrán enviar hasta 300 dólares acudiendo a cualquier sucursal del Correo Argentino con el equivalente en pesos, que se transformará a la moneda del país de destino o a dólares, mediante un esquema de acuerdos firmados con otros correos en la región. Si bien todavía la medida se está terminando de definir en el directorio del Central, se prevé que el costo por la transferencia no diferirá del que se cobra actualmente por el envío de una carta o encomienda al exterior. La remesadora Western Union suspendió esta semana sus actividades por un plazo de siete a diez días en varias de sus sucursales del país.

Las remesadoras escapaban de la órbita de regulación del BCRA, situación que cambió el año pasado con la reforma de la Carta Orgánica. Con las nuevas atribuciones, el foco de la autoridad monetaria estuvo puesto en ocupar ese vacío regulatorio que existe en el accionar de las compañías de transporte de caudales, empresas dedicadas al cobro de servicios y a las firmas que se encargan de las remesas al exterior. Esta falta de control había llevado a ciertos abusos por parte de las remesadoras que, ante los límites impuestos a la compra de moneda extranjera, habían elevado sus comisiones por el servicio, que en los últimos días subieron del 37 al 48 por ciento del monto enviado.

La primera medida que dispuso el BCRA fue habilitar a los bancos para la transferencia de fondos como ayuda familiar. Los giros por ese concepto que no supe-ren el equivalente a 300 dólares podrán concretarse en efectivo directamente en los bancos, presentando documentación del familiar o tercero a cargo, que recibirá el dinero. En el caso de giros que supe-

ren el equivalente a ese monto mensual deberán realizarse con cheques propios o con débito en cuenta a la vista de la entidad financiera. Si la ayuda familiar supera los 1500 dólares mensuales, se requiere conformidad previa del BC para cursar la operación. Sin embargo, para montos pequeños, las remesadoras seguían siendo una opción, porque los bancos rechazaban en muchos casos realizar la operación por el escaso margen de ganancia que implicaba.

Hace varios meses que el directorio del Central evalúa nacionalizar este envío de dinero al exterior para ayuda familiar e intervenir en los elevados costos que cobran las remesadoras. La solución es dejar el servicio en manos del Correo Argentino. “A partir de acuerdos múltiples que se cerraron con correos de distintos países, se puede ir con pesos y en el lugar de destino recibirán el monto en la moneda del país que se trata o en dólares, haciéndose cargo el Correo de la conversión”, explicaron desde el Central. Por esta vía sólo se podrá enviar el equivalente hasta 300 dólares. Se requerirá documento (original y focotopia), comprobante de CUIT o CUIL y documentación que demuestre el parentesco con quien recibirá el dinero.

La medida impactaría en las remesadoras, al menos en su funcionamiento actual, tanto por la diferencia de costos como por la disponibilidad de sucursales que ofrece el Correo. Según adelantaron fuentes de esta empresa estatal, el costo se ubicará en torno de un promedio de lo que cobra la entidad por el envío de una carta o encomienda al mismo destino que se realizaría el giro de fondos. En cuanto a sucursales, la red comercial de Correo Argentino se encuentra conformada por más de 5000 puntos de venta en todo el país, siendo la más extensa del ámbito nacional. Esta cantidad de sucursales le permite acceder al servicio no sólo en las grandes ciudades sino también en zonas rurales, donde muchas veces resulta ser el único medio de comunicación.

Por su parte, la firma líder en el segmento, Western Union, suspendió el giro de dinero al exterior en casi la mitad de sus sucursales. Sin explicar el motivo de la medida, la empresa informó que el servicio estará suspendido entre siete y diez días hábiles, y que sólo funcionarán aquellas agencias que no son propias y que estén dentro del Correo Argentino o supermercados. Fuentes del mercado señalan que la empresa solicitó acceder al mercado de cambios para adquirir divisas, y el Central no lo autoriza. La empresa ya había suprimido el envío de dinero a países de Europa y del resto del mundo. Sólo mantenía el giro de divisas para los países de la región. El servicio era utilizado con frecuencia durante estos días por parte de argentinos que concretaban en efectivo sus reservas de hotelería en países limítrofes.