Después de sumar diez meses consecutivos en rojo, la actividad de la construcción creció 4,4 por ciento durante febrero en relación con igual mes del año anterior. El informe del Indec muestra además que hubo un crecimiento de casi 3 por ciento respecto de enero. Los observadores del sector señalan que estos resultados marcan un quiebre de tendencia para la rama, caracterizada por su tendencia procíclica. Ocurre que luego de evidenciar el año pasado una caída del 3 por ciento por el efecto de la desaceleración económica, ahora vuelve a crecer en línea con el repunte del resto de los sectores.

En febrero, el bloque que registró el mayor crecimiento fue el de las obras petroleras, provocando un fuerte impulso en el sector al punto de explicar gran parte de su crecimiento total. Otro de los elementos destacados fue que la obra de infraestructura, o sea la obra pública, volvió a terreno positivo: no sucedía desde marzo del año pasado. Si hubo algo que causó sorpresa durante 2012 fue la desaceleración en la construcción de infraestructura, justo en un momento de menor crecimiento de la economía. Pero una de las explicaciones fue que era una estrategia necesaria para evitar tensiones sobre la cuenta corriente del balance de pagos. Este año, en cambio, da toda la sensación de que las cuentas externas se encuentran más relajadas, lo que implica que la obra pública puede volver a jugar un rol dinamizador sin presionar sobre la restricción externa.

Otra de las explicaciones acerca del actual crecimiento de la obra pública, afirman algunos analistas, es que 2013 es un año electoral, lo que acelera el gasto en infraestructura tanto en las provincias como a nivel nacional. Marina Dal Poggetto, del estudio Bein, dijo a Página/12 que “la construcción va a terminar el año arriba gracias a la incidencia de la obra pública”, para agregar que este impulso se asocia principalmente a motivos electorales.

A diferencia de los bloques anteriores, la obra residencial registró un nuevo retroceso. Sin embargo, se puede señalar que se trató de una de las caídas más moderadas del último tiempo. A partir de este resultado, muchos creen que, con el correr de los meses, el segmento registrará resultados positivos. Una de las explicaciones es la incidencia positiva que comienzan a tener los planes impulsados desde el Estado, como el Pro.Cre.Ar. Desde Ieric, instituto de estudios de la construcción, señalan también el buen desempeño que se registró en el rubro del cemento, explicado por los despachos en bolsa. Esto agrega aun más evidencia para hablar del mejor dinamismo en la construcción y remodelación en el segmento de obras chicas. Además, para algunos analistas estas construcciones pequeñas van a ir en aumento a causa del estímulo que ofrece la brecha cambiaria a los que conservan ahorros en dólares, porque reduce fuertemente los costos de la construcción que se encuentran pesificados.

Por su parte, la obra mediana y grande también gana impulso, lo que se puede observar a partir de los datos del mercado laboral. El informe de coyuntura de Ieric muestra que el empleo formal en el sector de la construcción alcanzó el mes pasado los 382.375 trabajadores, manteniéndose constante en relación con diciembre. Esto indica que se empieza a revertir la pérdida de puestos de trabajo registrada durante 2012. El informe indica además que existe un proceso de recuperación en las plantillas de personal de empresas que construyen obras de envergadura. “La situación supone un indicio positivo respecto del nivel de actividad en el futuro inmediato”, consideran en la entidad.

Como resultado de todo lo anterior, se señala que la pesificación del negocio no fue lo que afectó al sector el año pasado. Y consideran que a medida que se recupere la actividad del conjunto de la economía, la construcción irá en franca mejoría, por su rol procíclico.