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El índice Construya aumentó 9,3 por ciento en mayo respecto del mismo mes del año pasado. Este indicador, que mide la evolución de las ventas de los principales insumos para la construcción, registró además un incremento de 4,5 por ciento en los primeros cinco meses del año. Referentes del sector sostienen que esos resultados adelantan pronósticos favorables para 2013. La expansión del sector se debe al repunte de la obra de infraestructura, la construcción de vivienda social y la edificación-refacción de viviendas unifamiliares de particulares. “La estimación de crecimiento es 5 por ciento. Pero si el sector sigue a este ritmo, empezaremos a hablar de un 6 o 7 por ciento para el cierre del año”, dijo a Página/12 Gustavo Weiss, de la Cámara de la Construcción.

La actividad de la construcción continúa recuperándose por cuarto mes consecutivo, tras el flojo desempeño del año pasado, cuando cayó 5 por ciento. Entre los motivos de esa contracción se destacan los siguientes:

• La moderación de la obra de infraestructura del Estado.

• La limitada campaña agrícola 2011/2012, que fue afectada por las malas condiciones de humedad en el campo argentino. El excedente del agro había sido un motor de la construcción particular en los últimos años.

• La administración-regulación del mercado de cambios. Eso se debe a que fue necesario un período de adaptación del inversor a las nuevas reglas de un sector históricamente dolarizado.

Esos limitantes de la actividad empiezan a revertirse durante 2013, lo que permite el repunte de la construcción. Uno de los elementos que sobresale es el desempeño de la obra pública, que vuelve a ganar dinamismo, para convertirse en el motor de la recuperación. En los primeros cuatro meses del año, el bloque acumula una expansión de 3,6 por ciento respecto del mismo período del año pasado, mientras que en abril marcó un pico de 17,6 por ciento interanual.

Entre esa obra se destaca la de vialidad. También la de recursos hídricos, con represas en el Chaco y conductos en distintos puntos del interior del país. Referentes esperan que este año empiece a construirse una central hidroeléctrica en el Sur. Eso aportará más crecimiento al sector, con una inversión estimada de 5 mil millones de dólares, una cifra equivalente a la mitad del saldo comercial del país. Un tercer bloque es la edificación y refacción de vivienda social, gracias al impulso del Plan Federal de Viviendas. En este punto figura además el rol de Pro.Cre.Ar para estimular con crédito del Estado la construcción.

Desde la interpretación macroeconómica existen dos factores para explicar el incremento de los gastos de infraestructura pública. El primero es una situación algo más relajada de la restricción externa, gracias a la recuperación de las exportaciones de autos a Brasil y una cosecha por encima de las 103 millones de toneladas contra las 90 del año pasado. El segundo es el estímulo de los comicios legislativos, porque los gastos tienden a acelerarse en períodos electorales.

Informe: Federico Kucher.