Las acciones líderes del sector financiero y de servicios apuntalaron al índice MerVal que, tras seis ruedas consecutivas en alza, finalizó con un nuevo record histórico de 4368 puntos. El indicador ayer arrojó una suba de 4,5 por ciento. Las abultadas ganancias registradas por las compañías, el retraso relativo de las cotizaciones respecto de otras plazas de la región, el traspaso de inversores de bonos a acciones y especulaciones en torno de un posible ajuste de tarifas conformaron un combo que permite explicar en parte este recorrido. La suba es acompañada por un alto volumen de negocios, que ayer casi triplicó el monto habitual, con 109 millones de pesos, a partir de la presencia de inversores institucionales extranjeros. En lo que va del año las acciones líderes acumulan un alza de hasta 126,5 por ciento, como el caso de Telecom, y en el panel general Indupa registra una mejora de 285,6 por ciento, según el relevamiento del Instituto Argentino de Mercado de Capitales (IAMC). Los títulos públicos también mantienen una racha positiva, aunque los márgenes son inferiores.

En las últimas semanas comenzó a registrarse en la Bolsa una combinación de alza de precios e incremento en los volúmenes promedio de las operaciones. La operatoria con acciones es un mercado reducido. Se requiere de pocos fondos para mover el precio de una acción. Sin embargo, mantener la tendencia en alza de casi todo el conjunto de acciones requiere de otro tipo de espalda financiera. El promedio operado en este segmento oscila entre 30 y 40 millones de pesos diarios y actualmente registra negocios de entre 80 y 100 millones. “Esto está vinculado con la presencia de inversores del exterior que se posicionan en activos argentinos”, señaló un operador de Puente. En el mercado estiman el ingreso de entre 40 y 50 millones por esa vía.

Tanto bonos como acciones proyectan un buen margen de suba si se compara con activos similares en la región. “Los precios de las acciones se encuentran muy por debajo del valor técnico que debieran exhibir de acuerdo con los balances informados por las empresas”, destaca el informe de Portfolio Personal. Un indicador que utilizan las sociedades de Bolsa es el Price to Earning Ratio, que indica la relación entre el precio de los activos y las ganancias de las empresas; es decir, el número de veces que el beneficio anual se encuentra incluido en el precio de una acción. Este indicador para América latina se ubica en diez veces, mientras que para la Argentina es sólo cinco. “Sucede que últimamente las empresas presentan balance en medio de algún ruido político que hace pasar el hecho desapercibido”, señala la fuente.

Esto explica la suba del sector bancario, que comenzó a reacomodar el precio de sus acciones a los excelentes resultados que registraron durante el último año. En el primer semestre del año reportaron utilidades un 30 por ciento por encima de igual período del año pasado. Las acciones del Francés avanzaron 122,6 por ciento, seguidas por las de Grupo Galicia, 122,2, y Macro, 121,4 por ciento. Ayer estas acciones avanzaron de 9 a 10 por ciento. Lo mismo sucede con papeles de empresas de telecomunicaciones, cuyos beneficios vienen sustentados en sus operaciones de telefonía celular e Internet. Telecom acumula una diferencia de 126,5 por ciento. También hay empresas que son elegidas porque pagan dividendos en dólares, como Petrobras y Tenaris, más que por su vinculación con el precio del petróleo, aunque mantengan correlatividad con lo que suceda con el crudo.

Tras las primarias obligatorias la especulación sobre posibles cambios en la política económica benefició las acciones de empresas de servicio, pese a que registran resultados negativos en sus balances. Es así que Edenor acumula una suba de 75,8 por ciento, seguido por Pampa Energía (46,4) y Transener (41,3). En promedio, el MerVal acumula desde el principio de año una ganancia de 53,1 por ciento. En la plaza cambiaria el dólar se mantuvo en 5,71 pesos, mientras que el precio para las operaciones en el segmento informal se redujo en seis centavos hasta 8,88 pesos para su venta en cuevas.