La ministra de Industria, Débora Giorgi, anunció ayer que a partir del lunes entrará en vigencia la nueva ley de promoción para la actividad del software. Así lo hizo en un acto en el Palacio de Hacienda, donde participaron empresarios y miembros de universidades nacionales. Esta normativa apunta a potenciar exportaciones, mientras que fomenta el ingreso de nuevas pymes a la actividad. A su vez, extiende hasta 2019 los beneficios ya vigentes en el sector desde 2008.

“El sector del software es líder en creatividad y dinamismo. Tenemos que estar orgullosos, porque este logro tuvo que ver con un gobierno que apostó por esta actividad estratégica y con el trabajo entre empresarios, académicos y organizaciones gremiales”, dijo Giorgi. La industria del software cerrará en 2013 con 900 millones de dólares en exportaciones, 3750 millones de dólares en facturación y 78.500 puestos de trabajo. Estos resultados del negocio adquieren relevancia si se precisa el desempeño del sector en los últimos años.

n Entre 2003 y 2012, las ventas de la rama avanzaron 313 por ciento, mientras que los despachos al resto del mundo lo hicieron al 414 por ciento. Estas exportaciones tienen entre sus principales destinos Estados Unidos (59 por ciento del total exportado en 2012), Brasil (19 por ciento), Chile (6), México (4).

n En el mismo período, la plantilla de personal aumentó 266 por ciento. De los 69.500 trabajadores registrados el año pasado, 45 por ciento habían terminado estudios superiores. Esto implica un alto nivel de calificación en el personal que demanda la actividad.

n En cuanto al número de egresados en carreras informáticas, en 2006 eran alrededor de 3500 alumnos por año, al tiempo que en 2011 se contabilizaron 4219 nuevos profesionales. A partir 2012, el Ministerio de Educación puso en marcha un plan estratégico para la formación de ingenieros en este sector.

La ley de fomento del software que funcionó durante los últimos años registró el siguiente balance. En 2012, las empresas inscriptas al régimen de promoción fueron 324, las cuales emplearon a más de 25.000 trabajadores, vendieron por 1300 millones de dólares y exportaron por 450 millones de dólares. Estas compañías recibieron beneficios fiscales de alrededor de 1700 millones de pesos. En la nueva reglamentación, que entrará en vigencia a partir del lunes, se incorporan mayores ventajas para los exportadores. “Existirá un bono de crédito fiscal originado en contribuciones patronales para cancelar Impuesto a las Ganancias en igual proporción a las exportaciones promovidas declaradas”, detalla un informe del Ministerio de Industria. También se fomentará el ingreso de nuevas empresas pyme. Estas compañías tendrán un plazo de 3 años para acreditar la obtención de alguna norma de calidad. Los beneficios que obtengan estos productores no estarán alcanzados por retenciones.

Informe: Federico Kucher.