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El déficit fiscal primario se ubicó en 13.547,9 millones de pesos en febrero, con una suba del 140 por ciento respecto del mismo mes del año pasado, según lo informó el Ministerio de Economía. Los gastos primarios –sin computar el pago de intereses– registraron un avance del 39 por ciento interanual, destacándose el alza de las erogaciones para la Seguridad Social. El rojo financiero total, que computa la cancelación de pasivos, se ubicó en 16.392,7 millones de pesos. El sector público continuó con una política expansiva de los gastos, con el objetivo de dinamizar el mercado interno.

Las prestaciones de la Seguridad Social anotaron una suba del 38,5 por ciento en febrero respecto del mismo mes del año pasado, lo que se explicó por los ajustes automáticos en las jubilaciones previstos en la Ley de Movilidad, y por la expansión de la cobertura gracias a la moratoria.

Además de los gastos en seguridad social, el sector público realizó un esfuerzo inversor en infraestructura, herramienta para potenciar la recuperación económica.

“Los gastos de capital se incrementaron 42,7 por ciento anual, especialmente por la Inversión Real Directa llevada a cabo por la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (Arsat) y Nucleoeléctrica Argentina (Extensión vida útil Central Embalse y Actualización de Atucha I). También por las transferencias de capital para las provincias, que tuvieron como prioridad el desarrollo de políticas habitaciones, especialmente a través del Programa Techo Digno”, explicó el Ministerio de Economía a través de un comunicado.

En el primer bimestre, el déficit primario se ubicó en 15.005,3 millones de pesos, mientras que el rojo financiero total ascendió a 29.855,7 millones de pesos. A diferencia de los diagnósticos de economistas del mercado, desde el equipo económico aseguraron que el recorte del gasto para recuperar el superávit fiscal no tiene sentido si implica sacrificar autonomía en el manejo de la política económica. Esto implicaría perder capacidad para gestionar el presupuesto e impulsar la demanda agregada, en momentos en los que el mundo atraviesa una fuerte crisis en materia de actividad.