ECONOMíA › EL MINISTRO DE HIDROCARBUROS DEL PAíS VECINO ASEGURó QUE ESTáN ENVIANDO EL GAS PACTADO

En Bolivia desmintieron a Aranguren

“Tenemos un contrato con Argentina y estamos cumpliendo a cabalidad”, aseguró Luis Alberto Sánchez. El funcionario cruzó así al ministro argentino, quien había justificado las compras de gas más caro a Chile debido a un supuesto incumplimiento de Bolivia.

El ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia, Luis Alberto Sánchez, aseaguró que su país está cumpliendo con el contrato de venta de gas natural a la Argentina. “Nosotros hoy tenemos un contrato con Argentina y estamos cumpliendo a cabalidad de acuerdo a las nominaciones. Argentina nómina y nosotros cumplimos”, sostuvo el funcionario. De este modo, desmintió al ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien justificó las compras de gas a Chile a un precio sustancialmente mayor que el que se le paga a Bolivia con el argumento de que el gobierno de Evo Morales no estaba cumpliendo con los envíos.

Aranguren cerró a través de la estatal Enarsa un contrato de compra de gas a Chile con un precio de de 6,90 dólares por millón de BTU, que resulta un 53 por ciento más caro que el gas natural licuado que llega por barcos a un promedio de 4,50 dólares por millón de BTU y un 128 por ciento más elevado que los 3,02 dólares por millón de BTU abonado por las importaciones provenientes de Bolivia. A su vez, a diferencia de los despachos de Bolivia que se pagan a mes vencido y las cargas de los barcos que se liquidan horas antes de la entrega del combustible, el volumen total del gas adquirido a Chile se tiene que abonar por adelantado. El contrato también determina que cualquier controversia deberá ser resuelta por la legislación de Nueva York y obliga a las partes a mantener el acuerdo bajo un marco de “estricta reserva y confidencialidad”. El contrato de suministro que suscribieron Enarsa y Solgas –una firma intermediaria del grupo internacional GDF Suez– prevé la entrega de 86 millones de metros cúbicos de gas entre mediados de mayo y el 15 de agosto por medio del gasoducto Norandino que une la planta regasificadora chilena de Mejillones y la provincia de Salta.

Cuando fue consultado sobre el tema el viernes pasado, el ex CEO de Shell aseguró que eso se debe a que la capacidad para las alternativas más baratas está cubierta en esta época del año. “Nuestra obligación es hacerle la vida más fácil a la gente y que haya disponibilidad de producto. Tenemos que tratar de conseguir la mayor cantidad de fuentes de ese producto cuando lo necesitan, especialmente cuando se acerca el invierno, y poder tener gas”, argumentó. “Con Bolivia tenemos un contrato. Bolivia le vende a Brasil y a la Argentina y no tiene más gas, no nos puede vender más. El contrato dura 30 años, hasta 2027. En realidad, no está cumpliendo todavía la cuota que corresponde a este mes porque también ellos en el invierno lo necesitan”, agregó.

En respuesta a esas declaraciones, el ministro boliviano aclaró que ellos están cumpliendo con los envíos pautados y agregó que hasta el momento no existe una propuesta para incrementar los volúmenes de gas a ese país. “Estamos abiertos a analizar nuevas propuestas de volúmenes con los hermanos argentinos. Obviamente la prioridad es el mercado interno, con tantos proyectos que se están desarrollando en Bolivia, como el Mutún, litio, cementeras, amoniaco urea, propileno, polipropileno y generación de energía eléctrica”, remarcó.

Sánchez también opinó sobre el diferencial de precios que paga Argentina al traer el gas de Chile. “Es un gas traído de otro continente, y hay un costo de regasificación en el lado chileno y hay un costo de transporte al lugar de destino final y evidentemente tiene un precio mayor al que tiene Bolivia actualmente”, argumentó.

Compartir: 

Twitter

“Estamos abiertos a analizar nuevas propuestas de volúmenes con los hermanos argentinos”, aseguró Sánchez.
 
ECONOMíA
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.