Jueves, 28 de septiembre de 2006 | Hoy
Programas que empiezan cada vez más tarde podrían agravar el problema energético.
Por Maximiliano Montenegro
La televisión es motivo de preocupación para los funcionarios del área energética. El corrimiento de los horarios y el alargamiento de los programas del prime time hasta entrada la madrugada puede convertirse en una pesadilla en el verano, cuando se registran los picos de demanda energética, sobre todo en los días en que la temperatura supera cómodamente los 30 grados. Antes esos picos de consumo se daban alrededor de las 21, cuando las familias se reunían, después del trabajo, a mirar tele con las luces del hogar prendidas y los aire acondicionados o ventiladores funcionando a su máxima potencia. Hoy la familia argentina prolonga su entretenimiento y mantiene encendida la “caja boba” hasta altas horas de la noche, lo cual podría sobrecargar al sistema eléctrico.
En los meses de noviembre, diciembre y marzo, cuando las temperaturas sobrepasan los 30 grados, son inevitables los cortes puntuales de energía. En enero y febrero, el consumo no es tan alto en el área metropolitana por las vacaciones. Es algo que ocurre todos los años, y este verano las cosas podrían agravarse porque se sumaron al consumo una cantidad record de electrodométicos: plasmas, tv, aire acondicionados, heladeras, etcétera.
Para tener una idea, en el 2006 se venderán aparatos de aire acondicionado por 500 millones de pesos, frente a los 225 millones facturados en el 2004. Además, todas las noches, desde temprano, 20 millones de celulares en el área metropolitana son eschufados a la red para recargar baterías.
El sistema eléctrico trabajará al límite en la etapa de generación, para que la oferta de energía llegue a igualar la creciente demanda. Pero también podría haber dificultades en la distribución, ocasionando cortes en determinados barrios, se espera, de no más de dos horas.
El Presidente ya fue informado del asunto por empresarios del sector energético. Para tranquilizarlo se le dijo que “siempre que hay temperaturas extremas en las principales ciudades del mundo hay cortes”. En Capital y Gran Buenos Aires se produce un salto en el consumo de energía domiciliario hacia las 21. Es cuando se reúne la familia con todas las luces prendidas. En el verano, a los millones de televisores se le suman aparatos de aire y ventiladores. Para colmo, hay mujeres que tomaron el hábito de planchar de noche, mirando la tele. Después de los aire acondicionados, la plancha es el electrodoméstico que más electricidad insume.
En este contexto, la industria de la televisión podría hacer su aporte para complicar las cosas. Sin aviso previo, los programas líderes empiezan cada vez más tarde, y alargan su final, como parte de la frenética carrera por el rating. Así, el prime time se estira, junto con los niveles de encendido no sólo de la tele sino también del resto de los electrodomésticos. A la familia argentina le cuesta cada vez más conciliar el sueño. El lunes pasado, ShowMatch terminó a la 0.24, y recién entonces empezó Argentinos por su nombre (el programa de Andy), que finalizó a la 1.06. Pasada la medianoche el encendido era del 61 por ciento de los televisores, no muy lejos del 74 por ciento registrado a las 9 de la noche.
Este problema no se notará en Santiago del Estero, donde el máximo de consumo energético no se superpone con el prime time de la tele. Es a las 4 de la tarde, mientras es costumbre dormir la siesta con los aires a pleno.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.