Las entidades integrantes de la cadena de trigo manifestaron ayer su preocupación por el cierre de los registros de exportación y solicitaron “urgentes medidas que permitan regularizar la comercialización”. Las primeras exportaciones están previstas para mediados de este mes, pero para ello es necesario que el Gobierno habilite las operaciones abriendo el registro.

“De no modificarse esta situación, se producirán importantes perjuicios para toda la cadena y para el prestigio del país como proveedor confiable, atento a que en pocos días sería inevitable el default en los compromisos de comercialización externos, especialmente con Brasil”, señalan las entidades dedicadas a la producción, comercialización e industrialización del cereal. Fuentes oficiales dejaron trascender en los últimos días que la apertura del registro coincidirá con el anuncio de nuevas retenciones a las exportaciones del cereal, que en el último año aumentó su cotización internacional un 60 por ciento.