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Los principales bancos privados alemanes salieron a advertir que no hay futuro para Argentina sin un acuerdo con el Fondo Monetario. “Nos parece que las autoridades argentinas están sopesando la posibilidad de arreglárselas sin los organismos financieros multilaterales y nos preguntamos cómo creen que podrán conseguir nuevas inversiones sin un acuerdo previo con el Fondo o con el Banco Mundial”, declaró Guenther Koehne, del Dresdner Bank Lateinamerika.
Dos días antes de que Lavagna aterrice en Berlín, los financistas germanos no son los únicos que castigan a Argentina desde ese país. Como admitió el propio ministro antes de iniciar su gira europea, el gobierno alemán es uno de los que más se opone dentro del directorio del Fondo Monetario a la firma de un acuerdo con Argentina. Como es sabido, las autoridades alemanas presionan a Duhalde para que otorgue un resarcimiento (de unos 600 millones de dólares) para la compañía Siemens, después de que la administración De la Rúa anulara el multimillonario contrato de los pasaportes y las cédulas de identidad. Más aún, el gobierno de Berlín también presiona para que Duhalde dé alguna respuesta a los ahorristas alemanes que compraron bonos de la deuda argentina, hoy en default.
Los analistas de las entidades financieras alemanas aseguraron que notan “cierta recuperación” de la economía argentina, “si bien es todavía muy frágil”. Además, elogiaron la apertura del corralito sobre las cuentas a la vista como “una buena señal”. Pero aun así, no son demasiado optimistas sobre el futuro argentino. “Recuperar la confianza entre los inversionistas extranjeros le costará a Argentina muchos años de esfuerzos”, vaticinó el experto del Dresdner Bank Lateinamerika.
Y, sobre todo, temen que exista “un intento argentino de conseguir una salida en solitario de la crisis”, como explicó Oliver Stoenner, del Commerzbank. Los ejecutivos consideran que Lavagna quiere aprovechar su gira para sondear discretamente la eventual receptividad que tendría en los mercados un paso de tal naturaleza. “Sería terrible. Sería un arma de doble filo”, dramatizó Hans Georg Hesener, del Hypo-Vereinsbank. En tanto, Stoenner afirmó que “sería importante que el ministro defina claramente la posición de Argentina ante el FMI, por qué no se ha llegado todavía a un acuerdo”.
Eso mismo podría preguntar mañana Lavagna a las autoridades alemanas con las que se entrevistará: los ministros de Finanzas, y de Economía y Trabajo, Hans Eichel y Wolfgang Clement.