La Cámara Federal porteña ordenó reimpulsar una causa penal por el corralito de 2001 al revocar el sobreseimiento de un grupo de banqueros. La Sala II del tribunal de apelaciones dejó la existencia de “falta de mérito”, debido a que no hay en la causa pruebas suficientes para sobreseer ni para procesar a ejecutivos y responsables de los bancos. En este sentido, ordenó continuar con la investigación para abarcar todas las “hipótesis referidas a los motivos por los cuales los bancos se vieron impedidos de honrar los compromisos adquiridos con los ahorristas”. Los banqueros acusados son Carlos González Taboada y José Dagnino Pastore (Banco Sudameris), Juan Manuel Sacerdote y Víctor Zerbino (ex BankBoston), José Cristofani (Banco Río), Peter Baumman y Henry Gibbs (Citibank), Alan Roderic McDonald (Scotiabank) y Eduardo Escasany y Antonio Garcés, ambos del Galicia.