Jueves, 24 de agosto de 2006 | Hoy
ECONOMíA › EN CANCILLERIA NO VEN CONFLICTOS CON EE.UU.
Luego de presentado el proyecto de desarrollo nuclear, en la Cancillería se mostraban confiados en que la novedad no generaría roces en la relación con Estados Unidos, aun en la posibilidad de que el país retome la producción de uranio enriquecido, dormida desde hace más de dos décadas, algo que suele irritar la sensible epidermis de la Casa Blanca. “Somos escrupulosos cumplidores de la normativa de no proliferación. Le aseguro que el tema nuclear no figura entre los problemas de la agenda bilateral con Estados Unidos”, respondía una alta fuente del Palacio San Martín.
Puede que no lo sea ahora, pero en algún momento estuvo entre los puntos álgidos de la relación. Durante años, Argentina –junto a Brasil– se negó a adherir al Tratado de Tlatelolco, que planteaba la desnuclearización del continente, tal como había sido diagramada desde el Norte. Recién con el retorno democrático, Argentina mantuvo una posición más dócil en la materia –más por motivos económicos que impedían continuar la investigación que por convencimiento político–, hasta que finalmente firmó Tlatelolco, en 1994, y el Tratado de No Proliferación dos años después.
Desde entonces, como explicaban ayer en Cancillería, el ítem virtualmente desapareció en los contactos entre los representantes argentinos y estadounidenses. “Nuestra producción nuclear es para energía y, más que nada, para uso medicinal. Eso, en Estados Unidos se sabe. Con ellos tenemos una agenda bilateral amplia, con menos temas conflictivos de los que se piensa, cooperamos en muchas cuestiones. Le aseguro que el tema nuclear no figura entre los problemas de la agenda bilateral”, insistían ayer cerca del canciller Jorge Taiana.
No obstante, en la Cancillería reconocían que no habían tenido mucha intervención en la marcha del plan al que apenas habían echado un vistazo por arriba. “Eso lo armó todo la gente de Energía, del ministerio de De Vido”, decían. Por tal motivo, tampoco querían profundizar mucho en la cuestión, sobre todo por la posibilidad de que el país retome la producción de uranio enriquecido y con ello renueve la chance de poseer armamento nuclear.
Actualmente, el uranio enriquecido que utilizan los reactores argentinos es importado desde Estados Unidos. Es que a partir de los atentados a las Torres Gemelas, Washington busca restringir aún más el acceso del resto de los países a la tecnología nuclear con posibles fines militares y que Estados Unidos sea la única ventanilla de venta de uranio enriquecido.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.