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Desde Jerusalén

Familiares de víctimas de atentados solicitaron a la Corte Suprema de Israel que frene el canje de presos luego de que el gobierno de Benjamin Netanyahu publicara ayer los nombres de la primera serie de prisioneros palestinos que van a ser liberados a cambio del soldado Gilad Shalit, que fue capturado por Hamas hace más de cinco años.

Los israelíes tienen 48 horas para apelar contra el canje tras la publicación de la lista de los 477 palestinos que van a ser liberados en una primera tanda de un total de 1027 prisioneros. “Pensamos que el acuerdo va a derivar en más muertes”, dijo Meir Indor, que lidera Almagor, una asociación de víctimas de terrorismo, luego de firmar un pedido para que la Justicia se tome más tiempo en estudiar la lista. “Los atacantes ahora saben que ganan con el secuestro. Van a seguir secuestrando soldados”, declaró. Pero no se espera que las objeciones de los familiares demoren el intercambio de presos, dado que fue bien recibido a lo largo de Israel como una forma de cerrar un capítulo de violencia.

La mayoría de los reclusos fue trasladado en micros ayer temprano bajo fuertes medidas de seguridad a la prisión de Ketziot, cerca de la frontera con Egipto, aseguró el oficial del Servicio de Prisiones de Israel, Sivan Weizman. Otro grupo, en el que se encontraban 27 mujeres que serán prioridad, fue trasladado en tres micros de los servicios de prisiones a la cárcel de Sharon desde Monte Carmelo, cerca de la ciudad de Haifa. Los varones fueron llevados desde 11 cárceles en que se encontraban confinados hasta la prisión de Ketziot, en el sur de Israel.

En esta primera lista fueron incluidas 27 mujeres y, entre otros, Ahlam Tamimi, acusado de ser cómplice de un atentado suicida contra un restaurante de Jerusalén, y Nasser Yataima, condenado por el atentado contra un hotel en la ciudad costera de Netanya en 2002, donde murieron 30 personas. Fue excluido de la lista Marwan Brghouti, un político muy popular y que fue visto como potencial sucesor del presidente palestino, Mahmud Abbas.

La nómina, con el informe de cada uno de los detenidos, fue transmitida al presidente israelí, Shimon Peres, quien tiene potestad para la revisión de las penas. La prensa israelí informó que la autorización de Peres será acompañada con la frase “no perdono y no olvido”, mientras destacó que en el grupo, 292 prisioneros son palestinos de Cisjordania, 130 de la Franja de Gaza, 46 de Jerusalén Este, seis son árabes israelíes, uno de los Altos del Golán y dos provienen del extranjero.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.