EL MUNDO › MILOSEVIC CITO A CLINTON, CHIRAC, SCHROEDER, BLAIR Y OTROS LIDERES
Cuando Slobo enciende el ventilador
El ex dictador yugoslavo citó a una lista completa de líderes mundiales de la década en que él estuvo en el poder para demostrar que Serbia fue víctima de una conspiración. Y volvió a acusar a la OTAN de haberlo encarcelado.
Por Bosco Esteruelas
Enviado especial a La Haya
@No esperó hasta el final de su réplica, que concluirá el próximo lunes. Lo hizo a mitad de su intervención de ayer por la mañana. El acusado Slobodan Milosevic anunció que llamará a testimoniar a Bill Clinton y a otros líderes extranjeros para que esclarezcan su conducta en la guerra de Kosovo. “Tengo derecho a hacerlo”, subrayó al referirse al ex presidente norteamericano, a quien acusó de haber bombardeado deliberadamente la embajada china en Belgrado durante la ofensiva militar de la OTAN en la primavera de 1999. Milosevic descargó también toda su artillería intelectual contra Alemania, a la que responsabilizó de la desintegración de Yugoslavia para lograr predominio político y de financiar a la guerrilla albanokosovar. “Alemania instigó la desintegración y EE.UU. encendió la llama”, dijo.
“Pasará a la historia como el primer presidente de EE.UU. que ha bombardeado territorio chino”, observó irónico al hablar de Clinton. La petición de comparecencia del ex inquilino de la Casa Blanca debe ser ahora examinada por los tres magistrados del tribunal, que procederán si la estiman pertinente. Además del ex mandatario norteamericano y del presidente francés Jacques Chirac, Milosevic explicó que quiere también que vengan a La Haya el secretario general de la ONU, Kofi Annan; el primer ministro británico Tony Blair, la ex secretaria de Estado norteamericana Madeleine Albright, el equipo de mediadores de las negociaciones de Dayton (1995), con Richard Holbrooke a la cabeza; el canciller alemán Gerhard Schroeder, su ministro de Defensa Rudolf Scharping, el ex primer ministro y ex canciller italiano Lamberto Dini, el canciller francés Hubert Védrine, el senador republicano y ex aspirante a la Casa Blanca Bob Dole –”colaboró con la UCK (el Ejército de Liberación albanokosovar)”– y también el equipo de las negociaciones de paz de Rambouillet. En ese equipo Milosevic podría estar incluyendo a Javier Solana, que durante la guerra kosovar era secretario general de la OTAN e intervino en el proceso de conversaciones entre el gobierno serbio y el UCK que terminó en fracaso y condujo a la ofensiva de la OTAN en la primavera de 1999. “En realidad nunca hubo negociaciones, fue un pretexto para justificar luego la agresión –manifestó–. Todos ellos deberían hoy ser detenidos por complicidad con el terrorismo”, agregó.
Sobre el antiguo ministro de Exteriores alemán Klaus Kinkel, se despachó a gusto, porque lo acusó de canalizar la financiación de la UCK a través de los servicios de inteligencia alemanes. También volvió ayer a su posición de que él siempre quiso ser un elemento de integración y no de incitación a la limpieza étnica. Aseguró que Ibrahim Rugova, el líder albanokosovar que vendrá a Holanda a declarar contra él, debería estarle agradecido: “Le dije a Dini que lo pusiera un avión con destino a Roma para sacarlo con vida porque la guerrilla planeaba asesinarlo”. De Holbrooke, el mediador de Clinton para los Balcanes, que le mostró su agradecimiento en 1995 en Dayton por su papel en los acuerdos de paz en Bosnia, resaltó que una vez se sinceró con él así: “Lo que nos importa es nuestro predominio en Europa y en la Alianza Atlántica”. Y no faltó tampoco el nombre de Osama bin Laden. Del millonario saudita dijo que colaboró también desde Albania con la UCK para desestabilizar Kosovo.
Para Slobo una imagen vale más que mil palabras. Si parte de la primera jornada de la réplica la empleó en mostrar videos y fotografías de muertos y edificios arrasados presuntamente por las operaciones de la OTAN, ayer inició su intervención en la misma línea. Durante más de una hora y media entretuvo a la audiencia con una exhibición de las más espantosas imágenes que jamás alguien pueda digerir. Cadáveres y cadáveres, cráneos destrozados, cuerpos mutilados, mujeres embarazadas asesinadas, cuerpos de bebés y de niños. “Iremos viéndolas de una en una”, explicó como si setratara de una clase de anatomía. Con detalle iba citando el lugar y la fecha y enfatizando que se trataba de episodios de civiles albanokosovares, víctimas de operaciones cometidas por la OTAN o por la guerrilla del UCK. Milosevic sostiene una y otra vez que jamás propició las deportaciones en Kosovo y que fue la guerrilla y luego la Alianza Atlántica quienes la provocaron.
Se explayó con detalle de los hechos del 13 de mayo de 1999, cerca de Djacovica, donde un convoy de refugiados albanokosovares fue bombardeado por aviones de la OTAN. La Alianza admitió más tarde que se había tratado de un trágico error. “Interceptamos una conversación entre el piloto y el mando de operaciones. El piloto dijo que se trataba de un convoy de civiles. Le contestaron que la orden era eliminar el objetivo”, afirmó Milosevic. “Todas estas acciones son un ejemplo de la bestialidad de los ataques de la OTAN. Es la OTAN y no yo quien debe ser acusada de genocidio”, sentenció. Milosevic continuará el lunes su réplica. Los jueces han aceptado su petición de tener más tiempo para su discurso. En total, cuando concluya habrá empleado más de 14 horas, el doble de lo que se sirvió la acusación.