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Un día es rebelde, al otro oficialista y al próximo rebelde de nuevo. Ayer, el coronel Pedro Soto de la Fuerza Aérea Venezolana se rehusó a asistir al consejo de investigación que evalúa si cometió delito cuando en ejercicio de sus funciones –el jueves 7 de febrero– pidió públicamente la renuncia del presidente Hugo Chávez, a la vez que criticó duramente su gestión de gobierno. Ayer Soto leyó una declaración en la que se eximía de acudir al consejo porque no aceptaba la presencia del político de izquierda –el ministro civil de Defensa, José Vicente Rangel– como cabeza del consejo de investigación castrense. Por su parte, la militarizada Guardia Nacional (GN) decidió suspender hasta el jueves próximo el inicio del consejo de investigación del capitán Pedro Flores, quien se unió esa noche del jueves 7 al coronel Soto, cuando éste marchó al frente de una multitud de simpatizantes a la residencia presidencial para pedir personalmente la renuncia a Chávez.
La populosa aparición política del coronel Pedro Soto tuvo lugar el jueves 7 de febrero, durante un foro sobre la democracia en Venezuela, Soto intervino pidiendo la dimisión de Chávez para erradicar de Venezuela el peligro “castrista”. Tan solo unas horas después, sus simpatizantes impidieron que fuera detenido por una patrulla militar en una vía rápida, y le escoltaron a la Plaza Francia, donde fue vitoreado por una multitud de caraqueños de clases medias y altas. Luego, la multitud le acompañó hasta La Casona, la residencia de los jefes de Estado, en la que se sumó el otro militar rebelde, el capitán Pedro Flores. Después de un paréntesis en que no se conoció su paradero, los dos aceptaron presentarse a los comandos de sus respectivas fuerzas, que no los destituyeron ni encarcelaron pero decidieron someterlos a respectivos consejos de investigación. Soto se reincorporó a su fuerza con un nuevo destino y bajó sus críticas a Chávez, pero ayer, cuando que presentarse ante el consejo que lo investiga para determinar si cometió delito con las declaraciones que hizo en contra del presidente Chávez. se negó a hacerlo sobre la base del “izquierdismo” del ministro de Defensa.
Mientras tanto, la Guardia Nacional de Venezuela decidió suspender hasta el próximo jueves el comienzo de la investigación contra el otro militar involucrado. El comandante general de la GN, el general Francisco Belisario Landis, dijo que la investigación contra Flores “se hará minuciosamente”, y se contempla la posibilidad de su expulsión.