El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, aseguró que España no tiene constancia de que se haya producido un espionaje por parte de Estados Unidos en las comunicaciones de sus ciudadanos. Además, explicó que desde el verano está esperando una respuesta de la embajada de ese país sobre el tema. Cuando el semanario alemán Der Spiegel dio la noticia, en agosto, de que España estaba entre el grupo de países que podía haber sido espiado, se convocó para consultar al agregado de Negocios de la embajada norteamericana, en ausencia del embajador. Asimismo, García-Margallo dijo que en cuanto se produjo la primera noticia sobre ese asunto, el secretario de Estado en Washington trasladó la preocupación del gobierno por la posibilidad de que ciudadanos españoles hubiesen sido espiados. “No hemos tenido respuesta sobre ese tema”, se quejó el ministro, que no quiso arriesgar ninguna posición al respecto. No obstante, apuntó que en el momento en que las autoridades españolas tuvieran constancia de que el espionaje se produjo, llamarían al embajador estadounidense para trasladarle su postura al respecto.