Las autoridades bolivianas afinan los detalles para la investidura del presidente Evo Morales, que tendrá lugar hoy en las ruinas de Tiahuanaco, un día antes de que el jefe de Estado inicie oficialmente su tercer mandato consecutivo hasta 2020. Morales, reelegido en las elecciones de octubre con más del 61 por ciento, será ungido líder de los pueblos indígenas en Tiahuanaco, a 71 kilómetros de La Paz, la capital del antiguo imperio prehispánico del mismo nombre –cuya cultura se desarrolló entre los años 1580 antes de Cristo y el 1172 de nuestra era–, tras ser sometido a una serie de rituales para entrar en contacto con las fuentes de energía del lugar.

El sitio donde Morales asumirá la presidencia, que es Patrimonio de la Humanidad desde 2000, tiene gran significación espiritual para el mundo andino y por eso fue elegido por el gobierno boliviano en 2006, 2010 y este año para las investiduras indígenas del mandatario. La ceremonia comenzará con un ritual de limpieza de Morales, que después será vestido con un ch’uku (gorro ceremonial de cuatro puntas) que llevará una figura del sol repujada en oro y una túnica o unku tejida en fibra de vicuña, que también llevará una pechera repujada en ese metal precioso. El mandatario portará además un báculo y calzará abarcas.

La ceremonia continuará con la visita del gobernante al Museo Lítico de Tiahuanaco, donde está el antiguo monolito Bennet, de 7,8 metros de alto y 20 toneladas de peso. En medio de rituales dirigidos por “amautas” (sabios aimaras), Morales caminará luego rumbo a lo que queda de la pirámide de Akapana y después al templo de Kalasasaya, donde está la Puerta del Sol, para recibir los mandos indígenas en la escalinata del lugar. Una guardia indígena conformada por 600 aimaras custodiará el evento, con la misión de cuidar al presidente, dijo uno de los líderes indígenas de Tiahuanaco, Clemente Chiquipa, según la agencia estatal ABI.

“Son 300 mujeres y 300 varones organizados en la Guardia Originaria. Ya estamos listos y la madrugada del 21 de enero vamos a tomar nuestros puestos alrededor del centro ceremonial”, indicó Chiquipa. También está prevista la renuncia colectiva de los 20 ministros de Morales, como es habitual al finalizar cada año de gestión del Ejecutivo boliviano. La renuncia en bloque del gabinete tiene lugar cada 21 de enero, un día antes de la celebración del Día del Estado Plurinacional, fecha festiva decretada en 2010 para recordar la llegada al poder de Morales por primera vez en 2006.

Se prevé que el mandatario dé a conocer el viernes los nombres del gabinete con el que iniciará su tercer mandato. Mañana se celebrará la toma de posesión oficial de Morales y su vicepresidente, Alvaro García Linera, en la sede del Parlamento en La Paz, en un acto al que está prevista la asistencia de “seis a siete presidentes”, anunció esta semana el gobernante.