EL MUNDO
Cumbre aliada en Estambul, con compromiso para Irak y Afganistán
Por Bosco Esteruelas *
Desde Estambul
George W. Bush y Tony Blair informaron ayer por la mañana a los demás líderes de la OTAN el adelanto en 48 horas del traspaso de soberanía al nuevo gobierno de Irak. Algunos, como Jacques Chirac, mostraron cierto fastidio, al enterarse de ese modo de la noticia, saludada con satisfacción en la cumbre de Estambul por el resto de sus colegas. “Todo el mundo está contento. La resolución de la ONU era una condición necesaria, pero desgraciadamente no suficiente pare el retorno de la democracia. Lo importante ahora es que el destino del país esté plenamente en manos de sus ciudadanos”, afirmó el presidente de Francia. La cumbre atlántica que concluye hoy fue escenario por segundo día de enfrentamientos violentos entre más de 20.000 manifestantes y la policía en el centro de la ciudad, que se saldaron con unos 60 heridos y varias detenciones.
Los líderes norteamericano y británico optaron por celebrar una conferencia de prensa conjunta para reafirmar que su política en Irak no tiene fisuras. “Es un día de gran esperanza para los iraquíes, un día que los enemigos de Irak no esperaban ver jamás”, declararon en un comunicado previo. Los aliados aprobaron una declaración en la cual se acepta la petición de ayuda solicitada el pasado día 22 por el nuevo primer ministro, Iyad Allawi, al secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer: “Hemos decidido ofrecer la ayuda de la OTAN al gobierno iraquí para la formación de sus fuerzas de seguridad (...). Hemos encargado al Consejo Atlántico establecer con urgencia las modalidades para la puesta en acción de esta decisión, e igualmente nuevas propuestas para el apoyo a las instituciones de seguridad iraquíes”. De Hoop Scheffer restó ayer importancia a que algunos socios hayan ya adelantado que jamás harán adiestramiento en territorio iraquí. El alto representante de la UE, Javier Solana, afirmó, por su parte, que la Unión podría colaborar en conjunto en la formación de la policía como ya lo hace en los Balcanes.
Bush ha manifestado con énfasis en Estambul que “las diferencias entre los aliados son cosa del pasado”. Preguntado por ello, Chirac contestó en rueda de prensa: “Si lo dice él no puedo más que alegrarme”. En cualquier caso, el mandatario francés dejó bien claro cuáles serán los límites de la contribución de París y reiteró la oposición a implicar a la Alianza en el futuro iraquí: “Francia formará policías y militares si lo desean en nuestro país, pero jamás en su territorio. En la vocación de la OTAN no está Irak”.
El Pentágono hubiese querido ir mucho más allá en el compromiso de los aliados e incluso barajó la posibilidad de forzar un acuerdo más ambicioso a través del Comité de Planes de Defensa, del que no forma parte Francia, según fuentes diplomáticas, rememorando los pasos dados durante la gravísima crisis interna de la institución a principios de 2003. Probablemente se hubiese encontrado en esta ocasión con un nuevo rebelde: España. En el comunicado se reafirma que la Alianza continuará prestando ayuda logística al contingente polaco. Una oferta concreta y colectiva del bloque occidental será su Colegio de Defensa de Roma para el adiestramiento de los futuros dirigentes de las Fuerzas Armadas iraquíes. Y dentro de esa ambición encajan también las peticiones que personalmente hicieron el domingo por la noche los nuevos ministros de Exteriores y Defensa iraquíes, que viajaron a Estambul para reunirse con sus homólogos en la OTAN. Ambos pidieron tropas para la protección de fronteras y la sede de la ONU en la capital iraquí, así como medios blindados. Además, la alianza acordó aumentar a 10 mil (de los 6300) los efectivos para Afganistán.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.