EL MUNDO › FALLO POR LA DEFENSA DE LOS PRESOS DE GUANTANAMO
Revés legal para George Bush
La Corte Suprema de Estados Unidos falló que los prisioneros extranjeros de Guantánamo, Cuba, tienen derecho a la justicia.
Por Andrew Buncombe *
Los abogados que representan a los prisioneros detenidos en la prisión de Guantánamo anoche estaban preparándose para iniciar una serie de acciones legales después de que la Suprema Corte de Estados Unidos emitiera un fallo según el cual los detenidos allí tienen derecho a apelar legalmente su encarcelamiento. En lo que representó la derrota legal más fuerte para el presidente Bush desde que tomó el poder, la corte falló por 6 votos a 3 que tanto los ciudadanos estadounidense como los extranjeros tomados prisioneros como parte de la llamada “guerra contra el terror” no podían permanecer presos indefinidamente sin acceso a abogados o a juicios.
Esto es un duro revés para las políticas ilegales de la administración Bush”, dijo Clive Stafford Smith, un abogado de Estados Unidos que representa a cuatro ciudadanos británicos y dos residentes de esa nacionalidad mantenidos en prisión, en el extremo sur de Cuba. A pesar de las acciones de la corte, ningún prisionero será liberado de Guantánamo en un futuro cercano. Mientras la decisión les significó a los prisioneros acceso a los tribunales de Estados Unidos, en un fallo por separado la Suprema Corte dictaminó que el presidente Bush tenía la autoridad para encarcelar y mantener al ciudadano estadounidense Yasser Hamdi sin un juicio como un supuesto “combatiente enemigo”. Los expertos legales dijeron que, tomando los dos fallos juntos, esto quería decir que aunque los prisioneros tenían derecho a tener un juicio, Bush no había actuado ilegalmente cuando ordenó que ciertos prisioneros estuvieran presos sin cargos. El tribunal dijo que él había recibido esta autoridad específica del Congreso después de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Cinco británicos fueron liberados de Guantánamo en febrero pasado, pero otros cuatro, Feroz Abbasi, Moszzan Begg, Martin Mubanga y Richard Belmar, siguen en el campo de prisioneros. Tres residentes británicos, Bisher alRawi, Jamil al-Banna y Jamal Abdullah, también están detenidos ahí. El fallo de la Suprema Corte revirtió la decisión de un tribunal en primera instancia que había acordado con el argumento de la administración Bush que la prisión, ubicada en una base naval de Estados Unidos, estaba fuera de jurisdicción de los tribunales porque la base no estaba ubicada en territorio estadounidense. Los abogados de los prisioneros sostuvieron que esto creaba una “tierra de nadie” legal.
Dando por escrito la sentencia de la mayoría de 6 a 3 ayer, el juez John Paul Stevens escribió: “El encarcelamiento ejecutivo ha sido considerado opresivo e ilegal desde que se sostuvo que ningún hombre libre debería ser encarcelado, desposeído, proscrito o exiliado salvo por el juicio de sus iguales o por la ley de la tierra. Los jueces de Inglaterra desarrollaron el escrito de hábeas corpus en gran parte para preservar esas inmunidades de la restricción ejecutiva”. Stafford Smith dijo que él tomaba la decisión de la corte y estaría entablando una acción legal para que sean liberados el mes que viene.
No todos creen que el fallo de ayer haya sido una salida. Louise Christian, una abogada de Londres que representa a dos de los cuatro ciudadanos británicos en Guantánamo, dijo que todo lo que había logrado el fallo era sobre el tema de la jurisdicción de los tribunales. Señaló que mientras que el tribunal falló en una segunda instancia que Hamdi debería tener acceso a un abogado, Bush todavía tenía la autoridad legal para mantenerlo preso sin juicio. “Creo que el fallo Hamdi es muy deprimente”, dijo. “Si pueden aprobar el encarcelamiento indefinido sin un juicio para un ciudadano estadounidense, es difícil imaginar que van a hacer más por un extranjero detenido en Guantánamo”.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.