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El presidente transitorio boliviano, Eduardo Rodríguez, anticipó un acuerdo nacional, que implica el recorte del mandato del Congreso, para llamar a elecciones generales anticipadas. Rodríguez dijo que la “sensación de los sectores con los que me he reunido, tanto políticos como sociales, es favorable a este propósito”, en declaraciones a la CNN. Rodríguez sucedió en su calidad de titular de la Corte Suprema al presidente Carlos Mesa tras su renuncia el 9 de junio en medio de una honda crisis. A diferencia de su predecesor, Rodríguez parece tener buenas relaciones con el resistido Congreso de 130 diputados y 27 senadores, de cuya renuncia depende el llamado a elecciones para renovar también la asamblea legislativa, una de las más encendidas demandas de organizaciones sociales alzadas en la reciente agitación boliviana. “Entiendo que el Congreso, la próxima semana, va a acoger este propósito nacional”, afirmó optimista el presidente provisional. El Congreso reanudará sus labores el martes, mientras que una veintena de legisladores anticipó ya su decisión de resignar el mandato que vence en agosto de 2007. El cese del Congreso es esencial para elegir un presidente representativo en Bolivia.