La Corte Suprema de Chile oficializó ayer un dictamen que aprobó el desafuero del ex dictador Augusto Pinochet (1973-1990) para someterlo a un primer juicio por torturas y desapariciones de presos políticos en la cárcel clandestina de Villa Grimaldi. Una de las prisioneras que pasó por ese recinto, hace 31 años, fue la actual presidenta de Chile, Michelle Bachelet.

El pleno del máximo tribunal chileno ya había aprobado la medida el 8 de septiembre pasado, pero dos de sus integrantes se encontraban ausentes, por lo que ayer se repitió la votación y se ratificó el desafuero por nueve votos contra siete.

Pinochet, de 90 años, fue privado de su fuero hace un año y enfrentado a otros dos procesos por los desaparecidos que dejó la Operación Colombo y los delitos vinculados con las cuentas secretas que mantuvo en bancos de Estados Unidos y otros países. Al privar nuevamente de su inmunidad al ex dictador, la Corte Suprema autorizó al juez Alejandro Solís a interrogarlo y encausarlo, dentro de sus investigaciones por 59 casos de torturas y desapariciones en la Villa Grimaldi.