Por lo menos 103 personas del personal de la marina murieron ayer en un ataque terrorista de los rebeldes Tigres Tamiles. Un camión lleno de explosivos se lanzó contra un convoy de unos 15 ómnibus que transportaban marineros del puerto naval de Trincomalee. Fue el ataque más mortífero en un año que vio cómo Sri Lanka volvía a la guerra civil y sucede menos de una semana después de que 129 soldados murieran en un solo día luchando con los Tigres. La marina de Sri Lanka dijo que los marineros que murieron ayer estaban desarmados y, o bien se iban de licencia o volvían de una en el momento del ataque al que describieron como una “masacre a sangre fría”. Los Tigres Tamiles se negaron a confirmar que estuvieran detrás de los ataques, pero dijeron que estaban justificados.

Las muertes taparon por completo una movida diplomática de esta semana para recomenzar el proceso de paz. Un enviado japonés estaba en Sri Lanka ayer y el jefe negociador noruego debe llegar esta semana. Después del ataque de ayer habrá grandes temores sobre el futuro de las nuevas conversaciones entre el gobierno y los Tigres, que debía tener lugar en Suiza este mes. Por lo menos 2000 personas murieron violentamente este año entre el gobierno y los Tigres, según los monitores europeos enviados para supervisar un cese de fuego de 2002 .

El ataque suicida de ayer ocurrió en la ciudad de Habarana, un lugar importante de tránsito para el ejército de Sri Lanka. El convoy de 15 ómnibus de la marina se había detenido cerca de la ciudad y muchos marineros habían bajado cuando un camión embistió contra el convoy. La explosión fue tan fuerte que 13 de los 15 ómnibus quedaron destruidos, y la gente de rescate todavía anoche estaban buscando sobrevivientes entre las ruinas. La marina dijo que el número de muertos podía aumentar porque muchos de los cuerpos estaban destrozados. Dijeron que por lo menos 150 marineros habían sido heridos. La organización Liberación de los Tigres de Eelam Tamil (LTTE) –más conocidos como los Tigres Tamil– fueron los pioneros de los ataques suicidas como táctica, mucho antes que Al Qaida y otros grupos la adoptaran. Los ataques suicidas son llevados a cabo por una unidad muy cerrada y disciplinada conocida como la Tigres Negros.

La oficina del presidente Rajapakse dijo que el ataque era una “prueba más del absoluto compromiso del LTTE a la violencia para lograr su fin y de su total desprecio por las exigencias internacionales para abandonar la violencia y buscar medios pacíficos para lograr sus objetivos”. El ejército de Sri Lanka dijo: “Este acto inhumano es una clara venganza de los terroristas hacia la marina que les infligió sucesivas derrotas contra sus intentos de contrabandear armas y explosivos”. Pero la verdad es que el ejército de Sri Lanka está luchando por contener a los Tigres. La gran cantidad de muertos de ayer sucede sólo pocos días después de que el ejército entró en una trampa la semana pasada, cuando lanzó una importante ofensiva a las posiciones de Tigres en el norte. Por lo menos 129 soldados murieron y el ejército tuvo que abandonar la ofensiva después de un solo día de lucha. Los Tigres han estado luchando durante dos décadas para tener un país separado para los Tamiles en el norte y este de Sri Lanka, aunque ahora dicen que aceptarían alguna forma de autonomía. A pesar de que se acordó un cese de fuego en 2002, las conversaciones de paz pronto se quebraron y los diplomáticos han estado intentando recomenzarlas mientras el país desciende nuevamente hacia la guerra.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

Traducción: Celita Doyhambéhère.