El corresponsal de Telesur en Colombia, Fredy Muñoz, quedó en libertad ayer tras permanecer detenido por 50 días, acusado de estar vinculado a atentados de la guerrilla. Muñoz salió de una prisión de la ciudad de Barranquilla después de que el fiscal del caso revocara la medida en su contra por falta de pruebas, aunque sigue vinculado a la causa. “La liberación es una pequeña victoria para uno como defensor y para la persona que está padeciendo una situación difícil. Pero el proceso continúa”, afirmó a Página/12 Tito Gaitán, el abogado del periodista.

Muñoz, de 36 años, es investigado por su supuesta participación en ataques con explosivos realizados por el grupo armado FARC a infraestructuras eléctricas de las ciudades de Cartagena de Indias y Barranquilla en 2002 y 2003. Basándose en el testimonio de tres ex guerrilleros de las FARC, quienes están negociando una reducción de su pena, los servicios secretos (DAS) identificaron a Muñoz como el guerrillero conocido con el alias de “Jorge Eliécer”, acusándolo de ser responsable de explosivos del Frente 37 de las FARC. El periodista fue detenido el pasado 19 de noviembre en el aeropuerto Eldorado de Bogotá cuando regresaba de Caracas, donde participó de un taller de periodismo con Telesur, el canal financiado por los gobiernos de Venezuela, Argentina, Cuba y Uruguay. Sin embargo, el principal testigo en la causa admitió en diciembre que no conocía a Muñoz y que había hecho su declaración para obtener una rebaja de su pena.

La liberación de Muñoz se produjo tras la apelación presentada por su defensa el pasado 17 de diciembre. “Un fiscal de Cartagena en segunda instancia consideró que el señor Muñoz no tenía méritos para permanecer recluido por los delitos que se le imputan”, indicó un portavoz de la fiscalía. Para el abogado Gaitán, varios factores incidieron en esta decisión. “En primer lugar, hubo una actitud de un funcionario honesto que ponderó el proceso de manera profesional. Además hubo mucha presión internacional e incidieron los arrepentimientos y las contradicciones en las declaraciones de quienes acusaron a Fredy”, afirmó Gaitán.

Tanto Telesur como varias organizaciones de prensa denunciaron que el proceso contra Muñoz es de carácter político. “El DAS ha convertido este caso en un episodio para criminalizar la actitud independiente y el trabajo imparcial que desempeñaba Fredy como comunicador y para retaliar en contra de la misión de Telesur en el país”, advirtió el abogado Gaitán. Por su parte, fuentes de la fiscalía habían justificado la detención del periodista, alegando que tenían pruebas adicionales en su contra, pero no podían revelarlas porque estaban en el medio del proceso.

Sin embargo, el propio Muñoz denunció ayer que fue interrogado por efectivos de la DAS, con preguntas que no tenían relación con el caso, sino con el proyecto de Telesur, con sus preferencias políticas y su opinión con respecto al gobierno venezolano.

El presidente de Telesur, Andrés Izarra, repudió las irregularidades denunciadas por el periodista e informó que dos agentes de la DAS se presentaron ayer ante el fiscal que liberó al periodista para pedir explicaciones sobre la decisión. Izarra manifestó asimismo su alegría por la liberación. “La decisión confirma la confianza que siempre hemos tenido en la inocencia de Fredy”, indicó. “Lo esperamos con los brazos abiertos.” La historia no termina acá. Además de seguir vinculado a la causa, Muñoz debe ser cauteloso, dijo su abogado. “Ahora hay que estar atentos a que no haya ningún ánimo revanchista por parte de los organismos de seguridad que prefabricaron este proceso, porque cabe la posibilidad de que en lo sucesivo se pretendiera seguir sumando algún tipo de pruebas montadas”, advirtió Gaitán. Por su parte, Izarra mencionó el caso del sociólogo Alfredo Correa de Andréis, quien fue asesinado en 2004, presuntamente por miembros de la DAS, tras ser liberado de la cárcel, donde había ido a parar cuando ex guerrilleros lo acusaron falsamente de ser el “comandante Eulogio”.

“El DAS sigue indagando por el paradero de Fredy, tratando de presionarlo psicológicamente”, aseguró el abogado defensor. “Estaba muy feliz al ser liberado y encontrarse con su familia. Pero se está cuidando.”

Informe: Virginia Scardamaglia.