Liberado luego de siete días de secuestro, el fotógrafo peruano de la Agence France Presse (AFP) Jaime Rázuri, de 50 años, llegó ayer en la noche (once de la noche hora peruana, una de la madrugada de hoy hora argentina) a Lima. El periodista hizo el viaje de retorno acompañado por el vicecanciller peruano Gonzalo Gutiérrez, quien se había desplazado días antes hasta Medio Oriente para reunirse con las autoridades palestinas y buscar acelerar la liberación del periodista peruano. Antes de abandonar Palestina, Rázuri se reunió con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, quien lo recibió para expresarle personalmente su solidaridad por los duros momentos que pasó. Ambos tomaron un jugo y Abbas le obsequió al fotógrafo una pieza de cerámica.

Rázuri fue secuestrado el 1º de enero en la Franja de Gaza por uno de los tantos grupos armados palestinos que se mueven en la zona. Había sido enviado desde Lima por la AFP a Gaza para una cobertura de dos semanas en la zona y cuando fue raptado se preparaba para retornar al día siguiente al Perú. Nadie ha reivindicado hasta ahora oficialmente el secuestro, pero en boca de todos está la versión de que los autores fueron miembros del llamado Ejército del Islam, liderado por Mumtaz Dormush, y que este grupo, enfrentado a Hamas, exigía a cambio de la liberación del periodista que Hamas le entregue a 18 de sus militantes, a los que acusan de haber asesinado a dos miembros del Ejército del Islam. Las autoridades no han dado detalles de la forma cómo se obtuvo la liberación de Rázuri.

El canciller peruano José Antonio García Belaúnde ha asegurado que el gobierno peruano no intervino directamente en las negociaciones para la liberación del periodista. Dijo que el rol del vicecanciller Gutiérrez, enviado especial al Medio Oriente para este caso, fue tener una presencia activa en el lugar del secuestro, buscar el apoyo diplomático de otros países con influencia en la zona para una intermediación y presionar a los palestinos para una pronta solución del secuestro. “La negociación se hizo entre un grupo llamado familia Dormush y las autoridades palestinas. Nosotros no hemos intervenido directamente”, aseguró el canciller peruano, quien reveló que el canciller español, Miguel Angel Moratinos, tuvo un papel decisivo para lograr la liberación del periodista peruano, aunque no ha dado detalles de su participación. “Mi primer reconocimiento es a Miguel Angel Moratinos, quien hizo suya esta causa y nos ayudó enormemente en este proceso”, declaró el canciller García Belaunde durante la conferencia de prensa en la que anunció la liberación de Rázuri. Según la Cancillería peruana, el gobierno de Egipto también tuvo una participación activa en las negociaciones. Rázuri trabaja para la agencia francesa France Presse, por lo que el gobierno de Francia también se interesó en el caso, aunque su participación habría sido menos activa que la del gobierno español.

El secuestro del fotógrafo de la AFP movilizó a los principales gremios periodísticos del país. Hubo marchas ante la representación de la Autoridad Nacional Palestina en el Perú y los principales noticieros de televisión salieron al aire con el fondo de una gran foto de Rázuri con la leyenda “Liberen a Jaime Rázuri”. Diariamente se publicaron avisos en los periódicos y se transmitieron spots televisivos y radiales, financiados por los gremios de prensa, haciendo la misma exigencia. En Gaza, París y ciudades latinoamericanas como Santiago, Quito, Bogotá y San Salvador también se movilizaron los periodistas con el mismo pedido.

“Estoy convencido de que si no se habría dado esta movilización de los periodistas, el secuestro se habría prolongado más tiempo. Esta movilización sensibilizó a la opinión pública y le propinó un duro golpe a la imagen del gobierno palestino, y ayudó a acelerar la solución de este secuestro”, le señaló a Página/12 Luis Jaime Cisneros, periodista de France Presse y presidente de la Asociación de la Prensa Extranjera en el Perú.