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“Sánchez de Lozada está arrinconado como De la Rúa, pero no va a renunciar.” Entrevistado por Página/12, el analista político boliviano Cayetano Llobet dice tener buenos contactos con el gobierno y por eso afirma que el presidente seguirá en el poder. Mientras acentúa la militarización de las calles de La Paz y normaliza la situación con la policía, Sánchez de Lozada, según Llobet, “ya inició negociaciones para dar un cambio de rumbo”.
–¿Cuál es la situación del gobierno? ¿Va a renunciar el presidente?
–Le voy a responder con información, y no con mera especulación. Lo mismo que usted me pregunta se lo he preguntado hace una hora a un altísimo funcionario del gobierno y me ha dicho que no, que consideran que la situación ha cambiado respecto de ayer (por anteayer) y que Sánchez de Lozada dijo “soy un movimientista y no pienso moverme de aquí” (en referencia a su partido, el Movimiento Nacionalista Revolucionario, MNR).
–¿Y qué piensa hacer el gobierno de aquí en más para quedarse?
–El gobierno parte de la hipótesis de que hubo una conspiración. Lo primero que está haciendo el gobierno es controlar la situación de caos: si usted se fija en lo que pasó hoy (por ayer), la policía comenzó a salir a las calles en La Paz y la militarización de la ciudad no se limitó a una defensa de la Plaza Murillo, sino que fue mucho más extendida. Puedo anticiparle que, para seguir en control de la situación, el gobierno está dispuesto a darle el Ministerio de Defensa a un militar importante.
–O sea, el gobierno sólo se sostiene en las fuerzas armadas.
–El gobierno hizo una muy mala lectura de la situación para intentar imponer las medidas que conocemos y debe recomponerse políticamente. Eso lo sabe y por eso, al margen de asegurarse las fuerzas armadas, ya está iniciando negociaciones con distintos sectores, empresarios, sindicales y hasta los propios cocaleros, para iniciar un cambio de rumbo.
–Si está tan débil el gobierno, ¿por qué piensa que quienes lo enfrentan querrán negociar?
–Porque el gobierno estaría dispuesto a hacer bastantes concesiones. Simplifiquemos un poco las cosas: si hay conflicto tres días más, los militares le van a decir al presidente que no piensan seguir reprimiendo y el gobierno cae. Y para que no se repitan las escenas de los últimos días, Sánchez de Lozada sabe que no le va a bastar con los tanques en la calle.
–Sin embargo, el gobierno cree que esto fue una conspiración. ¿Quién fue el conspirador principal?
–Evo Morales, que hace tiempo exige la renuncia del presidente.
–No parece que Evo Morales pudiera por sí solo levantar a la ciudad de La Paz. Usted mismo dijo que el gobierno admite que cometió errores.
–Digamos que son las dos cosas. El gobierno hizo muy mal las cosas y tiene una oposición bastante fuerte. Está ante una sociedad cabreada y harta.
–Sánchez de Lozada está en una situación similar a la de De la Rúa.
–Sí, con la diferencia que es del MNR. Aquí, el MNR es algo así como el peronismo en la Argentina. Es un partido de poder.