EL MUNDO

Un repetido blanco rebelde

El presidente norteamericano George W. Bush insistió con que la semana pasada “fue dura” para las tropas ocupantes, pero que la situación en Irak “está mejorando”. Omitió hablar del arma nueva de la insurgencia: el secuestro de extranjeros en ese país. Ayer hubo nuevas capturas: dos periodistas checos habrían sido secuestrados por hombres armados en Taji, un suburbio de Bagdad. También la resistencia iraquí secuestró a once rusos que trabajan para una compañía energética de ese país en Irak. Seguía sin conocerse la situación de los tres japoneses secuestrados la semana pasada por un grupo chiíta denominado “Brigadas de los Mujaidines”, que amenazó con “quemarlos vivos” si Japón no sacaba a sus tropas de Irak. Y continúan desaparecidos nueve estadounidenses –dos soldados y siete civiles–, vistos por última vez el viernes . Por otra parte, se confirmó la liberación de los siete rehenes chinos.
De un conjunto que va en aumento, “doce rehenes ya fueron liberados por la insurgencia”, informó el Consejo de Gobierno iraquí designado por Estados Unidos, sin especificar la nacionalidad de los liberados. En lo que va del mes, al menos 30 extranjeros han sido secuestrados en Irak.
El premier japonés Junichiro Koizumi reiteró que no va a aceptar la exigencia del grupo que mantiene secuestrados a tres civiles japoneses. Ayer, el vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, se reunió en Tokio con Koizumi, y respaldó la decisión de ese país de no retirar las tropas de Irak, tal como lo exigieron los secuestradores de los tres japoneses secuestrados en territorio iraquí. “Respaldamos de todo corazón el camino que el primer ministro eligió”, aseguró Cheney. En el encuentro, éste elogió el envío de tropas japonesas para la posguerra de Irak. Horas después del vencimiento del plazo que dieron sus captores para ejecutarlos, continuaba la incertidumbre sobre el destino del trío.
Según la cadena qatarí Al Jazeera, los 11 rusos fueron secuestrados luego de un enfrentamiento entre un grupo de hombres armados y los guardias iraquíes del edificio de una sucursal de una compañía de energía rusa, en la capital iraquí. Y no descartó que dos de los guardias hayan muerto en el tiroteo. “Las once personas trabajan en la central eléctrica de Ad Dura, en Bagdad. Nuestra compañía actúa en favor del pueblo de Irak”, dijeron fuentes rusas citadas por el canal qatarí.
El secuestro de los rusos se produjo poco después de la liberación de siete civiles chinos capturados el domingo por insurgentes iraquíes cerca de la ciudad de Faluja, a 50 kilómetros de Bagdad.
A estos secuestros se suma la desaparición de dos periodistas de Ceska Televize, la cadena de televisión estatal de la República Checa, que ayer fueron vistos por última vez en Taji, un suburbio a 10 kilómetros de Bagdad. Según testigos, fueron secuestrados por “hombres armados”. Aparentemente, uno de los periodistas, Vit Pohanka, tenía planeado viajar en taxi hasta Amman, la capital de Jordania. Pero no se volvió a tener noticias suyas. En tanto, el gobierno alemán publicó un comunicado recomendando a los ciudadanos alemanes que abandonen Irak. El miércoles pasado, dos agentes de seguridad alemanes desaparecieron en Irak y, según las autoridades germanas, “probablemente estén muertos”.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.