EL MUNDO
Entre alarmas y medidas
El miedo londinense ya se siente en Italia y Dinamarca. Una mochila sospechosa fue la causa de una nueva falsa alarma, esta vez cerca del Palacio de Amalienborg de Copenhague. Sin embargo, la seguridad sigue siendo reforzada y policías uniformados patrullan las estaciones ferroviarias y otros sitios públicos. El gobierno italiano, en tanto, prepara para el próximo martes una serie de medidas antiterrorismo –similares a las vigentes para combatir a la mafia– que incluyen la ampliación de la detención preventiva, la vigilancia de los correos electrónicos y la figura del “arrepentido”. El miedo de ambos países parece justificado por un mensaje colocado en una página islamista en Internet luego de los ataques de Londres, en el que se los amenaza por su participación en la ocupación militar de Irak. Alemania también se sumó al clima de cooperación europea antiterrorismo que inició el gobierno de Tony Blair en estos días. Los ministros de Exteriores de Italia, Gianfranco Fini, y Alemania, Joschka Fischer, destacaron ayer la amenaza que representa el terrorismo para la comunidad mundial, se reconocieron como posibles víctimas y coincidieron en la necesidad de adoptar “medidas eficaces” para combatirlo. Italia “es un potencial objetivo del terrorismo como lo es toda la comunidad internacional, y por el momento los terroristas han demostrado que pueden atacar en cualquier localidad del mundo”, sentenció Fini.