EL PAíS › REUTEMANN NO LLEGA AL 14 POR CIENTO
El factor Lole
Una encuesta muestra que si fuera candidato, tendría el 13,8 de intención de voto. Sin él, el orden no se altera: Rodríguez Saá seguiría primero y Kirchner en un segundo lugar cercano y ya, en apariencia, consolidado.
Pese a tantas expectativas, una candidatura del gobernador santafesino no alteraría demasiado la pole position actual, según una encuesta de la consultora Equis que dirige el sociólogo Artemio López. Muestra el cuadro, una tabla encabezada por Adolfo Rodríguez Saá, Néstor Kirchner y Elisa Carrió, simplemente se le sumaría Carlos Reutemann en un primer puesto apenas superior al del sanluiseño.
La encuesta fue realizada entre el 27 de setiembre y el jueves 3 de octubre en la Capital, barrios del Gran Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Tucumán y Mendoza, con 1144 encuestados. Se plantearon los dos escenarios electorales que muestra el cuadro en esta página, con y sin la participación del santafesino en la carrera presidencial. Como se ve, su inclusión no genera cambios profundos en la estructura del voto.
Medido por clases sociales, el apoyo a Rodríguez Saá crece a medida que se desciende en el estrato socioeconómico, y también es mayor en el interior que la zona urbana de Buenos Aires. Kirchner gana votos en el estrato medio-pleno y en las zonas urbanas de todo el país. Carrió tiene un voto homogéneo en su distribución. El ex presidente Carlos Menem compite directamente con el puntano: su voto también es más fuerte en el interior y en los estratos bajos.
Luis Zamora tiene un voto concentrado en la clase media-plena, y en el entorno porteño. Igual, geográficamente al menos, que Ricardo López Murphy, sólo que el liberal crece a medida que se sube la escala socioeconómica. El escaso voto que recoge el cordobés José Manuel de la Sota se distribuye parejamente en la base y la cúpula de la pirámide social.
Haciendo historia, el estudio compara otros momentos de la intención de voto y descubre sus cambios. Rodríguez Saá y Kirchner tuvieron un claro crecimiento en el trimestre desde julio, período que también vio un estancamiento del voto en blanco, un descenso de Carrió y Zamora, una modesta alza de López Murphy y Menem y un estancamiento de todos los demás.
Las imágenes de los políticos fueron variadas. Eduardo Duhalde tiene el raro honor de casi empatarle a Menem en imagen negativa a Menem, con un 74,7 por ciento frente al 79,5 del riojano. Zamora, Carrió, Kirchner y Rodríguez Saá comparten sólidos porcentajes de imagen positiva, aunque son superados por el no candidato Reutemann, que llega al 37,7 por ciento.
Al preguntarse la intención de voto por partido, surge un panorama complejo. El 22,8 por ciento de los encuestados contestó que simplemente no sabe a qué partido votar, mientras que el 18 por ciento dijo que al PJ, con diferencias sorprendentemente pequeñas en cuanto a las clases sociales: entre los pobres son peronistas el 20 por ciento, entre los más ricos el 17,4. Sigue el ARI con el 14,1 y Autodeterminación y Libertad con el 5,7, con la UCR reducida a un humillante 1,9. El voto en blanco y el nulo suman un robusto 21,3 por ciento, lo que muestra que el nivel de descreimiento sigue sin abatirse demasiado.