EL PAíS › EL ARI BUSCA CANDIDATO A VICEPRESIDENTE DE CARRIO
Un casting sin perfil definido
La fuerza que lidera Elisa Carrió tiene que definir al compañero de fórmula para la presidencia. El debate se centra en las condiciones que debe reunir el candidato, pero está lejos de estar resuelto.
Por José Natanson
Un dirigente del PJ como Néstor Kirchner, que aporte el peso de los sectores peronistas; un centrista como Gustavo Gutiérrez, que ayude a atraer a los votantes más conservadores; un empresario que, al estilo Lula, le imprima un tono productivista a la fórmula; un socialista como Alfredo Bravo o Hermes Binner, que consolide el perfil progresista del ARI; o un gremialista como Víctor de Gennaro. En menos de un mes, Elisa Carrió deberá definir su compañero de fórmula, una decisión que –más allá del nombre– implica una toma de posición y una definición sobre el perfil ideológico de su partido.
Si no cambian los tiempos dispuestos por el Gobierno, el 15 de octubre los partidos políticos deberán inscribir sus alianzas ante la Justicia electoral. En principio, Carrió será la cabeza de una coalición de diferentes fuerzas integrada por el PARI, el Partido Socialista y, quizás, el Frente Grande.
La fecha clave es el 26 de octubre, día en que cada partido deberá oficializar su fórmula presidencial. Aunque la definición última está en sus manos, la líder del ARI conversó con algunos pocos dirigentes cercanos, a quienes les pidió que le “acercaran ideas” para empezar a analizar el tema. “El nombre lo va a decidir ella, pero habilitó la discusión”, asegura un diputado cercano a Carrió. Y agrega que no se trata sólo de la fórmula, sino de una definición política fuerte, que marcará una pauta sobre el proyecto del ARI.
Hasta ahora, la única opción descartada es la de intentar sumar a Luis Zamora: al margen de la cerrada negativa del diputado, en el ARI creen que el giro a la izquierda que produciría la jugada alejaría a muchos votantes potenciales.
Hay algunas certezas. En principio, deberá tratarse de un hombre: las encuestas que manejan demuestran que Carrió tiene mucha más intención de voto entre las mujeres que entre los hombres. Por otro lado, el candidato a vice deberá compensar a la chaqueña en aquellos aspectos más flojos de su perfil. En cualquier caso, la discusión está abierta y en el ARI conviven varios puntos de vista diferentes:
u Algunos proponen un compañero de fórmula con una clara identificación peronista, lo cual le permitiría a la chaqueña ampliar la base ideológica de su candidatura y llegar a sectores sociales que hasta ahora le son esquivos. Carlos “Chacho” Alvarez –que perdió el habla pero no la mirada política– fue uno de los primeros en sugerir el nombre de Néstor Kirchner. El problema es que el gobernador santacruceño está dedicado a su propio proyecto y es casi imposible que acepte ceder sus aspiraciones. La idea, sin embargo, sigue en pie: algunos dirigentes, como Mario Cafiero, creen que debe elegir a alguien de origen peronista. “No hay muchos posibles, porque tiene que tener una buena trayectoria y un perfil adecuado, pero sería lo ideal”, explican cerca de la chaqueña.
u Otra de las hipótesis consiste en intentar un giro al centro incorporando a un dirigente con un perfil ideológico distinto. El nombre más obvio es el de Gustavo Gutiérrez que, aunque pertenece al conservador Partido Demócrata de Mendoza, construyó una fuerte relación con Carrió a partir del trabajo conjunto en la Comisión de Investigación de Lavado. Gutiérrez aportaría a la fórmula un perfil moderado, de clásico dirigente de centro. Tiene, además, el extra de ser del interior, lo que ayudaría a compensar uno de los déficit de Carrió, cuya influencia se concentra básicamente en la Capital, algunos sectores del Conurbano y los grandes centros urbanos. A pesar de estas ventajas, Gutiérrez no es una figura muy conocida a nivel nacional. Por otro lado, su partido ya cerró un acuerdo con Ricardo López Murphy.
u La tercera alternativa se inspira en la decisión de Luiz Inácio Lula da Silva de consolidar el carácter industrialista de su propuesta ofreciéndole el segundo lugar en la fórmula a José Alencar, el empresario brasileño con una fortuna de 300 millones de dólares. La opción,mencionada por el ex frepasista José Vitar, no se ha logrado traducir en un nombre concreto. A diferencia de Brasil, la Argentina ha destruido o desnacionalizado su base industrial y no cuenta con conglomerados de grandes empresas de capital nacional. “El problema es que acá los empresarios son prebendarios, vendieron sus empresas. No hay un Alencar”, se quejan en el ARI.
u Otra alternativa es un socialista. Recientemente unificados en una sola agrupación, los socialistas controlan la única estructura electoral con que cuenta Carrió –el PARI es apenas una formalidad legal– y un bloque propio de diputados. Tienen dos dirigentes para ofrecer. Alfredo Bravo, figura emblemática del socialismo que, sin embargo, dudosamente aporte más votos que los que Carrió ya cosecha por sí misma. Y Hermes Binner, el intendente de Rosario cuya gestión es su principal capital político, pero que tiene pensado apostar a la gobernación de Santa Fe.
u La última posibilidad es la de Víctor de Gennaro, titular de la poderosa Central de los Trabajadores Argentinos y socio de Carrió en la fallida convocatoria “para que se vayan todos”. Aunque hubo versiones de todo tipo, la chaqueña nunca le ha ofrecido a De Gennaro nada concreto. El sindicalista, por otra parte, no está convencido de las ventajas de transformar su rol de dirigente gremial en una candidatura política.