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Desde Córdoba

El candidato del Frente Cívico, Luis Juez, ganó las elecciones a senador en la provincia de Córdoba, con una diferencia de menos de cinco por ciento con el candidato de la Unión Cívica Radical, Ramón Mestre, y el candidato de Unión por Córdoba, Eduardo Mondino, quienes peleaban el segundo lugar, de acuerdo con datos preliminares. La lista del Frente para la Victoria quedó en cuarto lugar, muy lejos de la pelea principal.

De acuerdo con los sondeos preliminares y los primeros números oficiales, el Frente Cívico ingresaría dos senadores, Luis Juez y Norma Morandini, y el tercer senador sería el radical Ramón Mestre, o quedaría en manos del peronismo que responde al gobernador Juan Schiaretti, representado por Mondino.

En la distribución de los diputados, de los nueve legisladores que renueva Córdoba, tres serían del Frente Cívico, tres del radicalismo, dos de UPC y uno del Frente para la Victoria.

Hasta las 23.30 de anoche, los datos oficiales de Ministerio del Interior decían que, computados algo más del 85 por ciento de los votos, Juez lograba el 30,66 por ciento de los sufragios, Mestre el 26,73 por ciento, Eduardo Mondino el 25,97, y el Frente para la Victoria, representado por el intendente de Villa María, Eduardo Accastello, el 8.77 por ciento.

En la elección a diputados, el radicalismo, encabezado por Oscar Aguad, lograba el 29,08 por ciento, el Frente Cívico (Gumersindo Alonso) 27,97 por ciento, UPC (Francisco Fortuna) 25,58 por ciento, y el Frente para la Victoria (Carmen Nebreda), el 9,13 por ciento.

De acuerdo con los primeros números oficiales, el radicalismo se convirtió en la gran sorpresa de la jornada, al quedar ubicado en un segundo lugar por encima de los candidatos del gobierno provincial y del kirchnerismo.

“Lo dijimos durante toda la campaña, la UCR va a dar la sorpresa –dijo el candidato a senador Ramón Mestre–, hay un nuevo radicalismo que se pone en marcha, esto es bueno para la gente y para el sistema de partidos políticos.”

Por su parte, desde el juecismo remarcaron el hecho de que más allá de los votos perdidos con referencia a la elección provincial de 2007 (cuando lograron un 36 por ciento de los votos) hicieron una gran elección porque debieron luchar “desigualmente contra los recursos del gobierno nacional, provincial y municipal”.

“Acabamos de ganar sin un mango, sin banca, sin un peso, contra el gobierno provincial, el gobierno nacional y el gobierno municipal”, dijo Juez en su primera aparición pública en el bunker de su partido en el centro de la ciudad. “Hemos ganado con 6 o 7 puntos de ventaja en senadores –agregó– contra un aparato monstruoso, una banda de ladrones, y por primera vez en la historia rompimos el bipartidismo.”

Luis Juez negó que este triunfo, menor al que le daban algunas encuestas previas, le reste posibilidades en su carrera por buscar la gobernación de Córdoba en 2011. “Los triunfos no condicionan, las derrotas condicionan”, dijo Juez, aunque aclaró: “No hemos largado ninguna carrera porque recién acabamos de llegar a donde queríamos estar”.

La baja de votos de Juez con respecto a la elección provincial de 2007 se dio en la ciudad de Córdoba, donde si bien ganó, estuvo alrededor de un 10 por ciento por debajo de los votos obtenidos en aquella oportunidad.

El candidato a senador reconoció que el conflicto entre los empleados municipales con el intendente Daniel Giacomino, un ex juecista hoy kirchnerista, del cual se lo culpa, ha sido un elemento clave en esa pérdida de votos.

Más allá de los dichos, la victoria de Juez es un resultado agridulce, porque no logró la diferencia esperada para cimentar su camino a la gobernación en 2011, y sus candidatos a diputados se enfrascaron en una inesperada pelea voto a voto con la lista radical encabezada por Oscar Aguad, quien calificó a la elección del radicalismo provincial de “histórica” y como un resurgimiento del partido.

Los grandes perdedores de la elección fueron las dos listas peronistas. Según datos preliminares, la lista que responde al gobernador Juan Schiaretti logró un tercer lugar, por detrás del radicalismo, mientras el kirchnerismo, encabezado por el intendente de Villa María, Eduardo Accastello como candidato a senador, logró menos de un 10 por ciento de los votos.

Pese a la mala cosecha propia, Schiaretti no se privó de endilgar la derrota al gobierno nacional: “Esta elección legislativa ha marcado dos cosas claramente: más del 90 por ciento de los cordobeses le han dicho no al avasallamiento que Kirchner quiere hacer de nuestra provincia; le han dicho no al modelo autoritario y prepotente de los Kirchner, que quiere ponernos de rodilla”. “Esta elección ha marcado en el seno de la patria que se acabó un modelo autoritario y prepotente, porque el pueblo argentino les dio la espalda a los Kirchner”, se despachó.