”Si vas a romper, tenés que romper lo antes posible.” De vacaciones, Elisa Carrió escucha estas palabras de algunos de sus dirigentes más cercanos, que se resisten a la idea de apoyar la candidatura presidencial de Julio Cobos en 2011 desde el Acuerdo Cívico y Social. Lejos de calmar la ansiedad, la ausencia de Lilita en medio de la crisis más profunda en la corta vida de la Coalición Cívica genera chispazos en varios distritos, pero sobre todo en el que se supone su principal bastión, la Capital Federal. El ex jefe de gobierno porteño, Enrique Olivera, está furioso con la chaqueña y casi no se hablan desde las elecciones. Algunos legisladores ya están pensando en abandonar el bloque aunque terminen sus mandatos en diciembre, y se especula con la existencia de pactos secretos entre el PRO y dirigentes de la CC.

El descontento dentro del espacio que lidera Carrió se viene arrastrando desde antes del 28 de junio, pero afloró después, una vez que el resultado de las elecciones se convirtió en un argumento irrefutable. “Fracaso”, “desastre”, “derrota”, son los adjetivos que le ponen al tercer puesto que obtuvo la lista encabezada por Alfonso Prat Gay, Ricardo Gil Lavedra y Lilita. “La situación no es la mejor, porque no sólo no hubo un reconocimiento al esfuerzo y al trabajo en el armado de las listas sino porque después quedó demostrado que lo que se hizo fue un desastre. Y pese a todo eso nadie hizo una autocrítica. Es muy difícil seguir avanzando así cuando no hay un espacio democrático”, se lamenta un dirigente porteño ante Página/12.

Más allá de la queja, el desenlace de la crisis en la CC sólo se demora por la falta de su máximo referente. Cuando vuelva de sus vacaciones, Carrió deberá utilizar sus mejores artes para contener el descontento de sus socios, aunque algunos por decoro no romperán de inmediato. La primera consecuencia podría ser el armado de un bloque cobista en la Legislatura, con algunos diputados de la Coalición. Fuentes del Parlamento porteño revelaron que Guillermo Schmidt sería el primero en pegar el salto a un eventual bloque afín al vicepresidente, donde también confluirían los ex radicales Fernando Cantero y Alejandro Rabinovich. Señalan que el alejamiento no se debe sólo a las “discrepancias” internas sino también a que habría “caducado” el proyecto “Carrió presidente”.

Al frente de esa movida, o mejor dicho por detrás de ella, señalan al histórico operador radical Enrique “Coti” Nosiglia. Otros de los que están “armando” para el proyecto cobista en la Ciudad son Juan Carlos Farizano y Daniel Bravo, ex legislador e hijo del socialista Alfredo Bravo. Dante Caputo y Rodolfo Terragno quedaron a un paso de ser candidatos de Julio Cobos en las últimas elecciones.

La situación de Olivera es más comprometida por su cercanía con Lilita. El legislador era presidente del bloque de la CC y terminará su mandato en diciembre. En esta elección, el ex radical ocupó el cuarto lugar en la lista de diputados nacionales y quedó afuera porque apenas si entró la tercera candidata. Pero, además, de los tres legisladores que tiene Forja, la agrupación de Olivera, sólo le quedará uno después del recambio. “Enrique va a tomar distancia de Carrió y va volver un poco a las fuentes”, anticipa un hombre de la Legislatura.

Por otro lado, un grupo íntimo de la líder de la Coalición Cívica está pensando cómo llegar mejor parados a la elección presidencial de 2011. Tienen en claro que Carrió no va a ser compañera de fórmula de Cobos y que no podrían torcer la balanza a su favor después la derrota en Capital, de la victoria del vicepresidente en Mendoza y de la independencia que mostró Stolbizer las últimas semanas. Así las cosas, le advierten a la chaqueña que si no está dispuesta a resignar su candidatura y va a romper con el Acuerdo Cívico y Social, lo tiene que hacer lo antes posible.

“La idea de no pegarle al PRO en toda la campaña electoral fue solamente sostenida por Patricia Bullrich. Pero eso fue un acuerdo de ella con (el jefe de Gabinete porteño, Horacio) Rodríguez Larreta y, si no repunta el proyecto de Carrió 2011, ella podría irse para armar algo con Macri a nivel nacional”, revela un dirigente enfrentado con la líder de Unión por Todos.