El represor Albano Harguindeguy fue eximido del juicio por violaciones a los derechos humanos e incluso cesó su detención por orden de la Sala Segunda de la Cámara Federal. Por razones de salud –está internado desde hace seis meses– se determinó “la suspensión del proceso y dejar sin efecto la detención”, tal como lo había solicitado el juez Norberto Oyarbide en un fallo anterior. Es en la causa que investiga el secuestro de los empresarios Gutheim durante la dictadura.

Los camaristas Horacio Cattani y Eduardo Farah confirmaron ayer la desvinculación del ex ministro del Interior Albano Harguindeguy, ratificando un fallo del juez Norberto Oyarbide que había dispuesto la suspensión del proceso y el fin de su detención. Un informe médico forense indicó que la salud del funcionario de la última dictadura militar era similar a la del ex comandante Emilio Eduardo Massera, cuyos juicios también se encuentran suspendidos en razón de su estado de salud. Si bien el fiscal Federico Delgado había considerado que el informe médico es “poco claro”, y por eso apeló la medida, el fiscal de Cámara Germán Moldes desistió del recurso.

La causa por la que se lo juzgaba investigaba el secuestro de los empresarios Federico y Miguel Ernesto Gutheim. Dueños de una algodonera, fueron secuestrados durante cinco meses por represores del Ejército no por razones políticas, sino económicas. Los obligaron a firmar un contrato de exportación que abría a los militares una línea de créditos con Hong Kong, que reduciría la asfixia económica por la que estaba pasando el régimen. En la causa también están acusados Jorge Rafael Videla –quien encabezó la junta militar a partir de 1976– y el ministro de Economía de entonces, José Alfredo Martínez de Hoz. Oyarbide les anuló a ambos los indultos que les había otorgado el ex presidente Carlos Menem en 1989.

Harguindeguy –que llegó a recibir en su despacho a las Madres que buscaban a sus hijos durante los años de plomo– estuvo preso también por su responsabilidad en el llamado Plan Cóndor, cuyo propósito fue coordinar el accionar de las dictaduras latinoamericanas en la década del ’70. El ex militar tiene pendiente un pedido de arresto internacional de la Justicia italiana por el mismo caso.