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Al final, de tan anunciada se quedó en amague. Adolfo Rodríguez Saá levantó ayer la marcha por “elecciones ya” que había convocado para el próximo 20 de diciembre. Casi un mes después de haberlo anunciado con bombos y platillos, el movimiento que postula la candidatura del puntano anunció que no concurrirá a la Plaza de Mayo, al cumplirse un año del levantamiento popular contra el gobierno de Fernando de la Rúa. El candidato justificó su decisión a través de un comunicado: “El Movimiento Nacional y Popular (MNyP) convocó hace un par de semanas a la Plaza de Mayo –dice el texto que firmó el comando superior del “adolfismo”–, y nos contestaron con la peor cara, con las amenazas del terror, del vandalismo, del saqueo irracional y la muerte anunciada”.
La decisión de levantar la movilización se produjo ayer en la reunión del comando superior del movimiento que respalda al puntano. El tema estaba pendiente, y los miembros del MNyP habían acordado que ayer mismo, en el encuentro partidario, se votaría qué hacer con la marcha. Como era de prever, los dirigentes decidieron archivar la protesta en reclamo de “elecciones ya”. “Estamos con la mejor cara del pueblo, su sentido libertario, su lucha por la soberanía y la inclusión, el progreso y el trabajo, con su decidida actitud por la paz social. En ese marco, el MNyP ha decidido que no concurrirá a la Plaza de Mayo el próximo 20 de diciembre”, explicó el comando de campaña de Rodríguez Saá.
Según los dirigentes del “adolfismo”, la decisión de levantar la protesta tuvo una razón principal: la necesidad de “preservar la posición en las encuestas”. Preocupados ante la posibilidad de que se produzcan choques con los piqueteros, los allegados a Rodríguez Saá optaron, finalmente, por lo que llamaron una “respuesta racional y de paz”. “No queríamos establecer ningún sistema de confrontación, plantear una competencia carecía de sentido”, argumentó a Página/12 un dirigente del MNyP. En concreto, lo que más alarmaba al “adolfismo” era que se produjera un enfrentamiento con los movimientos de desocupados –el 20 de diciembre confluirán sobre la plaza de mayo desde distintos lugares del país– y que eso perjudicara al puntano en las encuestas.
Aunque la determinación se tomó ayer, el debate venía dando vueltas desde hace unas semanas. Desde que todos los movimientos piqueteros salieron a criticar el lanzamiento de Rodríguez Saá –apenas un día después de que el puntano lo anunciara en conferencia de prensa–, los dirigentes del MNyP lo venían analizando en privado a la espera de una resolución final. El aparato sindical que lidera Hugo Moyano influyó con todo su peso para que el “adolfismo” bajara su apuesta más audaz. El camionero, quien era clave para garantizar una convocatoria masiva, fue uno de los que más insistió en que había que suspender la marcha. “Bastaría que cualquiera tire un fósforo para que se desate la violencia”, advertían desde hace días en el entorno de Moyano.
Con la suspensión de la marcha de Rodríguez Saá, el escenario de la Plaza de Mayo quedará a disposición del Bloque Piquetero Nacional, Barrios de Pie, Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados y la Coordinadora Aníbal Verón, las organizaciones de desocupados que convocan a la “Marcha Federal” y que confluirán, el 20, ante la Casa Rosada. La decisión del “adolfismo”, además, reveló otra vez que el puntano se preocupa mucho por la seguridad. Hace dos meses, cuando lanzó la “marcha de los sueños”, Rodríguez Saá suspendió dos actos en Mendoza y Salta, irritado por desajustes organizativos y problemas de seguridad.