La jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, ratificó que este lunes comenzarán los estudios genéticos para determinar si la sangre y la saliva aportadas por Felipe y Marcela Noble Herrera en diciembre pasado son aptos para establecer sus respectivos ADN. Uno de los abogados de Ernestina Herrera de Noble presentó un pedido de suspensión de los estudios argumentando que está de viaje hasta el 18 de octubre la doctora Primarosa Chieri, genetista que actúa como perito de parte de la dueña de Clarín. La jueza rechazó el pedido de postergación por cuanto Ernestina tiene designados otros peritos de parte y tampoco se frenaron los estudios en casos anteriores de viajes de otros especialistas. De esa manera, el lunes a la mañana, en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) se empezarán a estudiar las muestras.

En diciembre de 2009, Felipe y Marcela aceptaron la extracción de muestras de sangre, aunque sólo para que se comparen con las familias querellantes en la causa, García-Gualdero y Miranda-Lanuscou. Como las venas de Marcela resultaron muy finas, hubo dificultades con la extracción de sangre y aportó también muestras de saliva. Todo el proceso se concretó en el Cuerpo Médico Forense y se realizó por orden del entonces juez de la causa, Conrado Bergessio. La inmensa duda es si esas muestras fueron bien extraídas y bien preservadas. Una parte, por ejemplo, se guardó en la caja fuerte del juzgado de Bergessio y no hay constancias de la forma en que se hicieron los traslados ni si se mantuvo la custodia como correspondía. Para colmo, en esta causa ya hay demasiados indicios de maniobras para evitar que se conozca la verdadera identidad de Felipe y Marcela.

Este año, la Cámara Federal de San Martín desplazó a Bergessio por las asombrosas demoras en la concreción de los estudios de ADN. La primera orden de que se realicen los estudios genéticos tiene fecha del 17 de diciembre de 2002 y la Cámara ordenó hacerlas el 30 de abril de 2004. Esa es la razón principal del desplazamiento de Bergessio. Arroyo Salgado les imprimió otro ritmo a las actuaciones, pero falló el intento de determinar el ADN de Felipe y Marcela a través de la ropa que se les incautó en los allanamientos del 28 de mayo último. El camino que ahora tomó la magistrada es el de analizar las muestras entregadas voluntariamente en diciembre. El primer paso es determinar si son aptas o no.

Uno de los abogados de la dueña de Clarín, Eduardo Padilla Fox, pidió la suspensión del inicio de los estudios. El argumento fue que Primarosa Chieri está de viaje. Arroyo Salgado rechazó la postergación y explicó que hubo estudios que, por ejemplo, se realizaron sin la presencia del genetista de Abuelas de Plaza de Mayo, también porque estaba de viaje.

Para el lunes están convocados los especialistas del BNDG, los peritos de parte y los abogados para presenciar el inicio de los trabajos. Sólo se establecerá si la sangre y la saliva permiten determinar el ADN de Felipe y Marcela, pero la magistrada prohibió, por ahora, que se haga ninguna comparación. Ni con la ropa que se incautó en los allanamientos realizados en diciembre y mayo y mucho menos con los ADN de las familias que están buscando sus nietos.