El gobernador bonaerense Daniel Scioli confirmó ayer la hermética reunión que mantuvo la semana pasada con el ex presidente Néstor Kirchner. “Nosotros hablamos lo que tenemos que hablar en el momento que consideramos que hay que conversar en profundidad algunos temas”, señaló Scioli al confirmar el encuentro donde se habrían puesto paños fríos a la relación después de la reprimenda pública que Kirchner le había propinado al gobernador. Sobre el anuncio del cambio de domicilio electoral del presidente del PJ, Scioli dijo que creía “que a eso se le dio una especulación política”.

“En estos ocho años, siempre fue la manera de aclarar lo que haya que aclarar, hablar de lo que haya que hablar, del pasado, el presente y el futuro. Así que somos dos personas responsables de cara al país”, aseguró el gobernador bonaerense al reconocer la reunión que mantuvo con Kirchner la semana pasada en la quinta de Olivos. En la cita, los dos dirigentes pusieron el acento en la relación entre ambos, que se encontraba mellada por la reprimenda pública que había realizado Kirchner a Scioli por sus declaraciones acerca de que tenía “las manos atadas” con la inseguridad. Página/12 consultó a distintos allegados a los dos dirigentes sobre los pormenores del encuentro, pero el hermetismo sobre la reunión se mantiene, aunque algunos puntos se pudieron sacar a la luz, sobre todo la paz firmada, que se vio plasmada en la presencia del bonaerense en el acto de apoyo al gobernador santacruceño Daniel Peralta.

El viernes pasado, el ex presidente Kirchner encabezó el acto en Santa Cruz, donde anunció que volvería a utilizar el domicilio electoral que mantiene en la provincia patagónica. Sus dichos fueron tomados como un guiño hacia Scioli ante los rumores de que se presentaría como candidato para pelear por la gobernación bonaerense, aunque el Peronismo Federal interpretó que se estaba “despidiendo” del poder. Con su habitual optimismo, el ex motonauta opinó que en realidad “se le dio una especulación política” a las palabras del secretario general de la Unasur, porque “siento que cuando él está ahí se reencuentra con sus raíces profundas, con muchos recuerdos. Fue emotivo escucharlo frente a su pueblo santacruceño”. Lo cierto es que ambos se necesitan de cara al año electoral que se viene para sostener el proceso iniciado en 2003, cuando ambos fueron presidente y vice en la primera etapa kirchnerista. Y el gobernador es el que mejor mide en las encuestas frente a los adversarios que puedan presentarse, como Francisco de Narváez.

“Hay tantos dimes y diretes. Yo, la verdad, no me distraigo. Para mí la prioridad es gobernar la provincia, mi atención y preocupación están puestas en eso. Lo demás son versiones, rumores”, agregó el bonaerense disipando las especulaciones sobre candidaturas que se publicaron en los últimos días. Scioli aseguró que “no se habla de candidaturas, se habla de cuestiones que tienen que ver hoy con sostener este crecimiento en el tiempo, con cómo readecuamos el sistema financiero, cómo aumentar la capacidad productiva instalada, con que auguramos un fin de año con un gran movimiento económico, con una mejor distribución del ingreso”.

Ante las versiones que lo ponían en una candidatura presidencial enfrentando a Kirchner, más cerca del Peronismo Federal de Eduardo Duhalde que del Gobierno, Scioli respondió de manera ambigua: “No pienso en términos personales. Sólo pensamos en los cambios que logramos en la provincia, lo demás, si tiene que llegar, llegará”.