“No hay en el mundo otros 1700 jueves sin abandonar ninguno.”
Imagen: Pablo Piovano.

La Asociación Madres de Plaza de Mayo, que preside Hebe de Bonafini, cumplió ayer 1700 rondas ininterrumpidas alrededor de la Pirámide de la Plaza de Mayo, en reclamo de la aparición con vida de sus hijos detenidos-desaparecidos durante la última dictadura militar. “1700 jueves. Quién lo hubiera creído de aquel grupito de locas que enfrentó a la dictadura. No hay en el mundo una organización que haya marchado mil setecientos jueves sin abandonar ninguno”, destacó la invitación que hizo Madres al homenaje. Allí mismo, ese grupo de mujeres inició la primera marcha el 30 de abril de 1977, para exigir información acerca de sus hijos desaparecidos, encabezadas por su fundadora, Azucena Villaflor de Devincenci.

“Parece una cifra, pero creo que lo que las Madres hemos logrado en estos 1700 jueves tiene que ver con muchos pero muchos de ustedes: con los que creyeron en las Madres y nos acompañaron en los momentos más difíciles”, apuntó Bonafini. “Las Madres marcamos un camino: no faltar ningún jueves. Cuando llegamos a la Plaza no nos duele nada”, dijo la titular de la organización de derechos humanos. “Por eso digo que la salud está en las plazas, en el trabajo, en la lucha, en las calles, en el hablar, en comprendernos”, agregó.

“No es fácil decir que los hijos están vivos, de sentir que ellos nos encuentran cuando llegamos a esta Plaza, que ellos están apoyando lo que hacemos, porque nacieron en ustedes. Nuestros hijos nacieron en otros que luchan y pelean”, señaló Bonafini al destacar que ése es el motivo por el que se mantienen “fuertes, firmes y convencidas de que la única lucha es ésta”. “Hoy más que nunca, junto a la querida Cristina. Ella también aprende poco a poco que Néstor está vivo, también en esta Plaza, él también nos acompaña aquí”, indicó la dirigente que concluyó en una arenga a favor de la reelección de la actual mandataria. “El año que viene es hoy. 2011 es hoy. ‘Cristina Presidenta’ es hoy”, sintetizó Bonafini, que fue la primera impulsora de una campaña a favor de un segundo mandato de Fernández de Kirchner, con una recolección de firmas.