La causa judicial por la interna de la CTA se quedó sin jueza. Gloria Pasten, la magistrada que actuaba en el caso, se excusó de continuar luego de haber sido cuestionada por los senadores de la oposición por haber hecho lugar a un pedido de amparo presentado por la lista de Hugo Yasky para que el candidato de la lista 1, Pablo Micheli, se abstuviera de asumir como nuevo titular de la organización. La jueza está propuesta por el Poder Ejecutivo para ascender a camarista y su pliego iba a tratarse en la última sesión de la Cámara alta, pero a propuesta del senador Rubén Giustiniani el pliego fue reenviado a comisión, con el argumento de que Pasten había favorecido al sector de Yasky. En respuesta, ayer la magistrada se excusó de seguir interviniendo en el caso.

Tras conocer la excusación, Yasky denunció que la jueza “fue víctima de un apriete”. El dirigente advirtió que “tal como lo señala la asociación de letrados laboralistas, resultaría escandaloso que por una medida cautelar no compartida por algunos sectores, se pretenda demorar o rechazar un pliego, dado que este tipo de conductas ataca el concepto de independencia del Poder Judicial”.

La Cámara laboral deberá sortear ahora un nuevo juez para que se haga cargo del expediente. La jueza había dictado la medida cautelar el martes, aunque Micheli fue proclamado de todas maneras, con el argumento de que la notificación le llegó 45 minutos tarde. En el caso queda por resolver la cuestión de fondo, es decir el pedido de nulidad de las elecciones complementarias que la lista de Micheli realizó sin participación de sus adversarios, y en base a las cuales se declaró ganadora.