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Desde Rosario

“A los que arruinan el voto, tengan un minuto de reflexión y no cometan el sacrilegio cívico de profanar ese instrumento que es la esencia del sistema democrático sobre el que se alimentan la libertad y la República.” El pedido partió del ministro de Justicia santafesino, Héctor Superti, al brindar detalles sobre la segunda prueba que mañana tendrá el sistema electoral de boleta única.

El funcionario apeló al “compromiso cívico” y puso el acento en “el 5 por ciento del electorado que anuló el voto porque quiso”. Por eso, exhortó: “Aquellos que venimos de una generación en la que votar era un sueño, tal vez contrastamos con los jóvenes para quienes votar es algo obvio. Reflexionen. Costó mucho consolidar la democracia en este cuarto de siglo. Esta calidad institucional es como el aire: cuando está, nadie le da importancia, pero cuando falta o se envicia, uno comienza a asfixiarse”.

Dentro del casi 1,8 millón de santafesinos que votó en las primarias del 22 de mayo, los técnicos que supervisaron el escrutinio quedaron con la sospecha de que el electorado confundió la forma de votar en blanco. Es que esa vez fueron muchos menos que en comicios anteriores, pero sumados a los sufragios nulos, sí empardaban el promedio histórico. “Hubo electores que no pusieron ninguna cruz y pensaron que así votaban en blanco cuando en realidad estaban anulando el voto. Hay que capacitar más: para votar en blanco hay que marcar el casillero destinado a esa opción”, enseñó Superti.

Igual que en la primera vuelta, habrá cinco categorías electivas en las que el votante deberá pronunciarse, y una boleta por cada una: gobernador, diputados provinciales, senadores departamentales, intendentes y concejales. En el caso de las comunas, serán cuatro boletas, porque esas jurisdicciones no poseen legislatura local.

Una de las lecciones que dejó el debut del sistema fue la necesidad de corregir el tamaño de las urnas. Por eso, el ministro anunció que serán de mayor tamaño, que las boletas tendrán un troquelado mejor, y pidió al electorado (el padrón total es de 2.431.770 votantes) que “refuerce el doblado de las boletas”.

Superti reveló que se simplificaron los requisitos para completar el telegrama que las autoridades de mesa deben elaborar al término del escrutinio. El secretario de Tecnologías de Gestión, Javier Echaniz, precisó que “cuando surja un problema con un telegrama y no pueda ser resuelto por un veedor electoral, pasará a una mesa de incidencia en el Ministerio de Seguridad, que lo resolverá rápidamente”.

Para el domingo habrá “mejoras estéticas” en el sistema de difusión de los datos, pero el resto del dispositivo conservará pautas y método en relación con la elección pasada, que fue considerada por todo el arco político como un modo superador. Las autoridades adelantaron que para “profundizar el estudio del comportamiento electoral” habrá encuestadores en algunos locales de votación. Las respuestas a esos sondeos serán anónimas, voluntarias y gratuitas.