Según el ex presidente Eduardo Duhalde, en las elecciones PASO del 14 de agosto hubo un “fraude informático escandaloso”. Así, sin identificar sus fuentes salvo por la presencia de un grupo de fiscales informáticos, volvió de lleno a la campaña con una denuncia contra la empresa que realizó el escrutinio provisorio y aseguró que, de no haber mediado ese “fraude”, el oficialismo habría obtenido entre un 38 y un 42 por ciento. Fuentes oficiales recordaron a Página/12 que el escrutinio definitivo fue realizado por la Justicia electoral con un sistema informático propio, que la diferencia con las cifras del recuento provisorio fue de apenas un 0,03 por ciento, y que la empresa acusada por Duhalde es la misma que fue contratada durante su mandato para las elecciones del 27 de abril de 2003. “Hubo manipulación, se utilizó un software específicamente diseñado que permite corregir automáticamente los porcentajes, modificándolos en el sentido que se lo desee. Como decidieron 50 por ciento (porcentaje que obtuvo el kirchnerismo) podrían haber elegido 54, porque al ser una elección interna, no hay control”, afirmó Duhalde, como si las PASO se hubieran realizado sin la intervención de la Justicia electoral. El candidato del Frente Popular no dudó en advertir que se produjo “un fraude que no tiene antecedentes en la historia de la democracia recuperada”, por lo que exigió que “no vuelva a ocurrir” en los comicios del 23 de octubre y que se llame “a licitación pública” para definir la compañía encargada de realizar el recuento de los votos.

El ex jefe de Estado anticipó que presentará una denuncia formal ante la Justicia penal y que enviará una carta a la Presidenta para informarle sobre la situación. Pero decidió anticipar el contenido de su denuncia en una conferencia en la que estuvieron presentes Hilda “Chiche” Duhalde y los dirigentes Carlos Brown, José Antonio Romero Feris, Eduardo Mondino, Miguel Angel Toma, Daniel Basile y Marina Cassese, entre otros. “Es una denuncia pública contra Indra, una manifestación de que se produjo un fraude en las primarias y lo hacemos porque no queremos que el 23 de octubre esto se vuelva a repetir”, afirmó Brown, jefe de la campaña duhaldista. Sin embargo, el ex mandatario había señalado a la empresa responsable del escrutinio, pero sin identificarla, y aseguró que “la misma” compañía ya tuvo denuncias también “por fraude informático, casualmente, en Ecuador y Venezuela, los países más amigos de Argentina”.

El ex presidente se presentó con un grupo de “fiscales informáticos”, quienes luego de terminar la conferencia de prensa mostraron telegramas en los que se registraron irregularidades y volvieron a acusar a “los data entry” de haber ingresado en forma incorrecta los datos, aunque no pudieron dar precisiones sobre la supuesta existencia del “software” que habría hecho posible modificar los resultados a medida.

Las fuentes oficiales consultadas por este diario no quisieron hacer declaraciones porque el Gobierno decidió no salir a responder “una nueva payasada que no resiste el menor análisis”. Pero explicaron que el escrutinio definitivo se realiza con documentación diferente al provisorio, que se basa en los telegramas, y que no lo hace ninguna empresa sino el Poder Judicial. También destacaron que la contratación de Indra se hizo por licitación pública internacional, “al igual que en su gobierno”, y que la firma no tiene denuncias por fraude. “Aunque la tecnología avanza y el software es cada vez más moderno, se trata del mismo servicio y la misma empresa que lo hace desde 1997, una empresa que se dedica hace 30 años a la defensa, el control del espacio aéreo y lo electoral en todo el mundo”, describieron. A la queja de Duhalde sobre una supuesta demora en recibir las boletas, también le respondieron que “el Gobierno sólo otorgó los fondos, cada partido podía imprimirlas donde quisiera”.