Las medidas que anunció ayer el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, aunque fueron dadas a conocer en un contexto de conflicto hacia el interior de la línea aérea de bandera, no fueron tomadas de apuro sino que estuvieron en estudio durante un largo tiempo e incluso, en algunos casos, forman parte del plan de negocios de la compañía presentado y aprobado por el Congreso hace más de dos años, según le aseguraron a Página/12 fuentes de la empresa y también desde el Gobierno. La disputa con dos gremios, que afectaron la actividad en las últimas semanas, precipitó la decisión, que terminó de afinarse durante el fin de semana en reuniones en Olivos de las que participó la presidenta Cristina Kirchner junto al ministro de Planificación, Julio De Vido; el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, y el titular de Aerolíneas, Mariano Recalde.

“El tema se venía trabajando desde antes. Quizás el conflicto convenció de la inexorabilidad de tomarlas ya. Se venían planteando porque existían dificultades operativas”, aseguró un funcionario que siguió de cerca el proceso. Desde la aerolínea refuerzan el concepto: “Estas medidas se vienen estudiando hace bastante: lo de la flota homogénea, entre otras cosas, está en el plan de negocios de 2009”, que fue aprobado por ambas cámaras del Congreso. “El contexto ha ayudado. La toma de posición ha ayudado. Pero todas las medidas que fueron adoptadas tienen mucho tiempo de estudio y preparación”, completan.

El asunto se siguió atentamente desde la Rosada. “Toda cuestión que tenga que ver con la empresa se hace con el aval de la Presidenta”, indican cerca de Recalde. Desde el gabinete lo confirman: “Hubo intervención directa de la Presidenta sobre el tema”. Y no sólo eso. Al grupo cuatripartito que gestó las medidas (CFK, De Vido, Schiavi y Recalde, más el aporte del secretario de Medios, Alfredo Scoccimarro) se sumaron otras carteras, como Trabajo y Turismo, que opinaron en aquellos temas específicos que les competen. Tanta dedicación no es algo casual, ni un capricho presidencial, según explican cerca de la Casa Rosada. “Se tomarán todas las medidas que sean necesarias para que Aerolíneas Argentinas se recupere plenamente –anticipa el funcionario–. Hay un empecinamiento de este gobierno en demostrar que una empresa manejada por el Estado puede funcionar.”