El Comité Federal de la UCR, que nuclea a los presidentes de los comités radicales de todas las provincias, se reunió ayer encabezado por el titular del partido, Mario Barletta, para analizar la situación partidaria tras la derrota en las elecciones nacionales y empezar a trabajar en una agenda propia para fortalecerse. El tema de las alianzas de cara a las legislativas de 2013 no estuvo al margen del debate y trascendieron las primeras diferencias entre los dirigentes radicales de los distintos distritos. Por un lado, el mendocino Alfredo Cornejo adelantó que en su distrito no realizarían acuerdos electorales mientras que el porteño Carlos Más Vélez propuso debatir el marco de alianzas para el año que viene, con la perspectiva de las próximas presidenciales. Al iniciar la reunión con un extenso informe, Barletta remarcó el carácter provincial de las legislativas e impulsó la idea de darle flexibilidad a cada distrito para que establezca sus acuerdos. No faltaron tampoco las críticas al gobierno nacional.

En el histórico Comité Nacional de la calle Alsina, los dirigentes radicales de todo el país se reunieron por primera vez desde que asumió Barletta, en diciembre de 2011, y desde las elecciones en las que Ricardo Alfonsín obtuvo el 11,5 por ciento de los votos. El ex intendente de Santa Fe había hecho la semana pasada un encuentro con los legisladores nacionales y prevé hacer en abril otro con los intendentes. En paralelo, mantiene su recorrida por el interior visitando referentes de todas las líneas internas. En su discurso criticó duramente al kirchnerismo por la política de transporte y por el proyecto de reforma de la Carta Orgánica del Banco Central. Barletta consideró que el Gobierno “trató de ponerse en el otro extremo del menemismo, pero no es tan así” y anticipó la decisión de avanzar con una denuncia penal contra el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi; el subsecretario de Transporte Ferroviario, Antonio Luna, y autoridades de la CNRT.

Respecto de la situación partidaria, manifestó su preocupación por la atomización y el internismo radical, que termina perjudicando la imagen y el desempeño del partido. Habló también de la reforma de la Carta Orgánica, que se frustró por falta de quórum a fin del año pasado y que será reincorporada a la agenda partidaria.

En el encuentro participaron también las autoridades radicales como Alicia Mastandrea, Juan Manuel Casella, Gerardo Morales, Atilio Benedetti, Miguel Giubergia, Daniel Salvador, entre otros.

A su turno, Alfredo Cornejo aclaró que la visita de la diputada del PRO Gabriela Michetti a Mendoza fue “protocolar” y que la reunión no quiere decir que se sume “a un proyecto que no sea el de la UCR”. En verdad, Cornejo integra el grupo de intendentes que en los últimos meses se mostró junto al jefe de Gobierno, Mauricio Macri, aunque sostiene que no es “tácticamente útil” tomar decisiones nacionales ante una elección en 2013, centrada en los distritos. Según el intendente que integraba el espacio del ex vice Julio Cobos, “Argentina necesita un partido de alternancia y la UCR está preparada por su gran desarrollo territorial, que no tienen ni el socialismo ni el PRO”. En la misma línea, otro referente de los intendentes, el juninense Mario Meoni, se reunirá con Macri mañana, durante la exposición de ExpoAgro que se realizará en su municipio.

En contraposición, Más Vélez sostuvo que precisamente para evitar la atomización radical es necesario discutir y definir este año el marco de alianzas que contemple el escenario nacional de 2015, con el objetivo de evitar el fracaso de los acuerdos políticos como sucedió con el socialista Hermes Binner. Las diferencias quedaron sobre la mesa, pero la UCR está lejos todavía de tomar alguna definición al respecto.