“Vamos a remitir un proyecto de ley al Parlamento para ratificar el acta que firmamos con la ciudad de Buenos Aires. Es necesario que de una buena vez por todas el Parlamento, donde están representadas las provincias, defina qué modelo de país somos”, aseguró ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, llevando el debate por el traspaso del subte al plano político. “Ahora ponen una medida cautelar para no gobernar”, sostuvo sobre la medida que el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, presentó ante la Justicia para detener la ejecución del acta firmada a principios de enero.

“El gobierno de la ciudad de Buenos Aires judicializó con una medida cautelar el acuerdo oportunamente firmado”, destacó Fernández de Kirchner fundamentando su decisión de llevar el acta de acuerdo por el traspaso del subte firmada con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, al Congreso para su ratificación. Macri solicitó una medida cautelar a la Justicia para que el Estado Nacional no pueda continuar con lo firmado hasta que se resuelva el conflicto. “Nos decían que querían dialogar y, por otro lado, presentan una medida cautelar. Esa no es forma de dialogar”, agregó con fastidio por los ribetes que fue tomando la negociación con los representantes de la Ciudad.

A pesar de haber reclamado insistentemente en su campaña y durante su primer mandato el traspaso del subte a la Ciudad, Macri se retractó a poco más de dos meses de haberlo aceptado. El subte está en discusión desde el año pasado, aunque en este caso la Ciudad en vez de hacerse cargo por pertenecer a su jurisdicción aduce falta de garantías por la falta de inversión y de seguridad. Fernández de Kirchner ya había hecho mención a la actitud de Macri en el discurso de inicio de las sesiones legislativas, cuando ordenó que la Policía Federal custodie por 30 días más las estaciones del subte, hecho que el jefe de Gobierno porteño adujo para no cumplir el acta. Antes ya se habían dado distintas discusiones por situaciones similares, como el traspaso de la Policía Federal que exigía el macrismo.

“Es necesario que el Parlamento argentino defina qué modelo de país somos, si vamos a seguir un modelo centralista donde el gobierno pone todos los recursos o vamos a ser en serio un país federal, igualitario y equitativo”, destacó la Presidenta fustigando la posición de Macri, quien se retractó del traspaso aun después de haber aumentado las tarifas. “Ahora el derecho cautelar es para no hacerse cargo de las obligaciones”, acusó CFK y agregó que “estas cosas no deben judicializarse. Los jueces no pueden decidir cómo tiene que ser gobernada la Argentina”, recordando un viejo reclamo sobre las medidas cautelares que impiden la implementación de leyes como la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que se encuentra en un parate por una medida similar. “En esto voy a coincidir con el discurso del señor Presidente de la Corte Suprema –amplió en relación con el discurso pronunciado el martes por el juez Ricardo Lorenzetti–, que dijo que los jueces no pueden gobernar, que los que tienen que hacerlo son los gobernantes.”

“El envío al Parlamento no es el marco de una pelea entre sectores políticos, sino de un modelo de país federal. Queremos darle contenido político y realzar la condición federal de nuestro país”, aseguró un funcionario de la Casa Rosada explicando la propuesta y el contenido que se enviará al Congreso para su ratificación. “Como sucedió con la resolución 125, en la que no se veía un camino para el acuerdo, se recurre al Parlamento para que los representantes de las provincias definan la situación de forma política”, indicó el funcionario recordando el conflicto por las retenciones móviles que finalmente no se aprobó por el voto “no positivo” del vicepresidente Julio Cobos. La sanción de una ley que ratifique lo acordado entre Nación y ciudad de Buenos Aires pretende ser una fuerte señal política que ejercerá presión sobre el jefe de Gobierno porteño y sus decisiones.

El anuncio fue realizado en la Casa Rosada frente a los gobernadores que presenciaban la inauguración de distintas obras de infraestructura. “Este es el derecho cautelar para no gobernar. Es la última, me parece un hallazgo. Imagínense si cada uno de estos hombres que son gobernadores pusieran una medida cautelar para no hacerse cargo de lo que les corresponde”, chicaneó con seriedad señalando a los mandatarios que observaban satisfechos a un lado del salón.